Luego de la muerte de Osama Bin Laden, comenzaron a reproducirse ataques de las fuerzas especiales estadounidenses contra miembros de Al Qaeda. Este viernes tres «insurgentes islamistas» murieron al ser alcanzados por misiles de un avión por control remoto (drone) estadounidense en el noroeste de Pakistán.
En Pakistán, estos aparatos de la CIA suelen tener como blanco a Al Qaida y los talibanes, informaron responsables militares.
El ataque de hoy, es el cuarto de este tipo desde que un comando de las fuerzas especiales estadounidenses mató a Osama Bin Laden hace once días en una casa del norte del país. Se produce además en un momento de gran tensión en las relaciones entre Pakistán y Estados Unidos.
Esta vez la operación se produjo en Jarkamar, en el distrito tribal de Waziristán del Norte, bastión de los talibanes aliados a Al Qaeda. Estos últimos reivindicaron el doble atentado suicida que mató al menos 80 personas en Shabqadar, en el noroeste del país.
«Un drone estadounidense disparó dos misiles contra un vehículo ocupado por insurgentes islamistas, matando al menos tres de ellos», declaró a la AFP un responsable militar paquistaní que pidió el anonimato.