El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, realizó el único entrenamiento de la jornada y al mediodía las autoridades del Municipio de Dunedin y de la International Rugby Board (IRB) le brindaron un cálido recibimiento.
El plantel se entrenó en las instalaciones del Caledonian Ground, en una mañana muy fría y soleada en Dunedin, por un espacio de una hora y media.
La práctica consistió en distintas facetas del juego en el aspecto defensivo y ofensivo, en el que prevaleció el contacto con la pelota, ensayos en el line y la salida del scrum.
El dato saliente de la jornada fue que el jugador de Tucumán Rugby Club, Julio Farías, se entrenó con el resto del plantel tras superar una fatiga en uno de los aductores.
«Hoy me exigí a fondo y la molestia que tenía en el aductor no la sentí y pude entrenarme con el resto de mis compañeros», señaló el tucumano.
Finalizada la actividad física, Los Pumas fueron recibidos oficialmente en el Dunedin Town Hall por el alcalde de la ciudad, Dave Cull, y por el presidente de la IRB, Bernard Lapasset.
El momento más emocionante de la fiesta fue cuando Agustín Gosio cantó, en representación de la delegación argentina, la canción Color Esperanza, de Diego Torres.
Previamente, Cull chocó su nariz con los argentinos como muestra de bienvenida, mientras representantes de la colectividad escocesa realizaron distintos bailes, al tiempo que un grupo de bailarines chinos efectuó protagonizó una danza como muestra de agradecimiento y gratitud hacia Los Pumas.
Tanto el entrenador Santiago Phelan como el capitán del equipo, Felipe Contepomi, agradecieron al público presente la cálida recepción brindada.
El seleccionado argentino volverá a entrenarse mañana a las 10 hora local en el Caledonian Ground y posteriormente los jugadores Mariano Galarza, Agustín Gosio, Manuel Carizza, Nicolás Sánchez, Alfredo Lalanne y Genaro Fesia atenderán a la prensa.
Los Pumas debutarán en la Copa del Mundo el próximo sábado a las 20,30 hora local (5,30 de Argentina) frente al seleccionado de Inglaterra.
