Un hombre se encuentra internado en grave estado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez tras haber recibido un disparo tras un partido de baby fútbol en el que participaba un familiar. Ocurrió en un predio de Moreno y Andrada, sede del partido entre Santa Teresita y Deportivo Rosario, donde niños de 12 se reunían a disputar un partido de la categoría 99.
Sin embargo, a minutos de culminar el encuentro, se desató una batalla a golpes de puño entre padres y chicos por una disputa propia del cotejo y, tras despejarse la pelea, uno de los entrenadores regresó a la cancha junto a otras personas armadas y le disparó por las espaldas a un familiar de uno de los jugadores.
«Un chico del equipo perdedor le empezó a pegar a otro chico y de ahí se originó una batahola entre padres, jugadores, y todos. Pero de acuerdo al informe que dan los árbitros, el hecho del baleado no ocurrió en el momento», contó Reinaldo Divonis, presidente dela Liga Ardity, en declaraciones radiales, además de manifestar que se trató de un “caso aislado”.
Asimismo, el árbitro del partido contó que vio cómo fue baleado el familiar herido. “Nos metimos en el buffet para no quedar en el medio de la gresca”, explicó al medio televisivo Todo Noticias.
La principal víctima de la disputa, quien recibió el disparo, fue operada y le quitaron un riñón afectado por el disparo. Se encuentra en estado delicado en el Heca.