El canciller Héctor Timerman difundió hoy un comunicado en respuesta al ministro de Defensa británico Philip Hammond. El texto del comunicado dado a conocer por el Ministerio de Relaciones Exteriores es el siguiente:
«En los últimos días hemos visto una intensa batalla dirigida por el Ministro de Defensa del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte contra la República Argentina. El señor Philip Hammond es un adversario de temer. Ocupa el cargo desde el cual en 1922 se agredía a 458 millones de personas que vivían bajo el dominio colonial del Reino Unido. Sus dominios ocupaban el 20% del planeta. En ese porcentaje se encontraban, y aún continúan, nuestras Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur.
El señor Hammond ha exigido que la República Argentina se arrepienta por haber dicho en un spot publicitario que nuestros atletas se entrenan en suelo argentino para competir en suelo inglés. El señor Hammond debería saber que el mundo es más seguro cuando se usa la creatividad que cuando se bombardean poblaciones civiles en países independientes.
Me imagino que desde que asumió su cargo el señor Ministro de Defensa Hammond estará muy ocupado controlando cuantos soldados británicos envía a las guerras que ha declarado pero, no dudo, que en algún momento habrá tenido tiempo para leer a la escritora Margaret Atwood, nacida en una de sus antiguas colonias, quien en 1993 en la novela La Novia Ladrona (The Robber Bride) da un consejo que su gobierno debería considerar: ‘La guerra es lo que sucede cuando fracasa el lenguaje’.
El Reino Unido con su obcecada decisión de violar las resoluciones de las Naciones Unidas ha hecho fracasar el lenguaje en demasiadas oportunidades. Un país que no posea las armas nucleares que despliega Gran Bretaña en forma secreta por los mares del mundo no puede imaginar resistir 39 resoluciones de las Naciones Unidas exigiendo que se siente a negociar con la Argentina el fin de la situación colonial que atraviesan lo territorios denominados la Cuestión Malvinas.
Con su actitud, Gran Bretaña continúa demoliendo el sistema multilateral que nació de los horrores de la Segunda Guerra Mundial basado en la igualdad entre las partes. ¿Si Gran Bretaña, miembro del Consejo de Seguridad, viola las resoluciones votadas por los demás miembros tiene derecho a exigir que otros países las cumplan? Sólo le quedan las armas. Sólo le queda seguir sumando víctimas para cada vez tener que «honrar» más muertos.
La República Argentina se encuentra sentada, y lo seguirá estando, en la mesa de negociaciones como testimonio que recordamos a los muertos en nuestro compromiso de no abandonar jamás la decisión de concluir el conflicto con Gran Bretaña en forma pacífica. Nada es más irrespetuoso con la memoria de quienes perdieron la vida en los campos de batalla que la necia decisión de impedir que avance la paz.
Lamentablemente, el pueblo argentino, al igual que el pueblo inglés, también tiene sus muertos. Nada diferencia a una madre ante la tumba de su hijo, porque las lágrimas desconocen los idiomas y las geografías.
Le recuerdo al señor ministro que el primer Ministro David Cameron aun no ha respondido al pedido de la República Argentina realizado a la Cruz Roja de mediar para que se permita identificar a los muchos soldados argentinos y británicos que se encuentran sepultados en tumbas sin nombres en el territorio ilegalmente ocupado por sus fuerzas armadas. Honremos la memoria de los muertos ayudando a sus familias a tener una tumba donde ir a llorarlos.
El señor ministro de defensa exige, cual poderoso caballero, que públicamente expresemos el arrepentimiento argentino por la creatividad de un aviso que resume nuestros sentimientos. Aún no ha explicitado qué escarmiento elegirá si rehusamos cumplir sus exigencias.
En vez, le propongo que venga, que se siente en la mesa de negociaciones. Que el Reino Unido no necesite seguir manteniendo en las Malvinas la zona más militarizada del mundo. Un soldado cada menos de tres habitantes.
Me imagino al Mahatma Gandhi, que algo le enseñó al colonialismo inglés, escuchando la frase que tanto ha ofendido al poderoso ministro y decir nuevamente que una verdad jamás debilita una causa justa.
Por último, no deja de tener cierto humor negro que el ministro de defensa británico haya elegido la cadena de televisión Sky News para exigir disculpas por la creatividad de mostrar, en forma pacífica, que aún existe el colonialismo. Campaña a la que ha sumado a varios diarios en Australia, Estados Unidos y el Reino Unido que, al igual que Sky News, tienen la peculiaridad de tener como accionista al señor Rupert Murdoch. El mismo Murdoch cuyos periodistas robaron mails, pincharon teléfonos y pagaron por información de artistas y miembros importantes de la oposición política a su gobierno.
Curioso que el Ministro de Defensa británico se encuentre castigando la creatividad argentina junto a quien según el Parlamento Británico eligió «encubrir antes que investigar el mal comportamiento y disciplinar a los responsables». Un informe que describe a Murdoch como no apto para dirigir una empresa multinacional. En el informe parlamentario sobre el aliado del Ministro de Defensa abundan las pruebas de la connivencia política entre Murdoch y los asesores mediáticos de David Cameron.
Al señor Murdoch lo entiendo, pretende tapar con una campaña xenófoba, llamando a la creatividad argentina como un ataque «anti-británico», un escándalo que ya le ha costado la cárcel a varios de sus lugartenientes. ¿Qué pretende tapar el gobierno de David Cameron?
El nuevo aliado del gobierno británico, el editor que, sin vergüenza, publicaba mails robados de las artistas contando sus vidas privadas dice que los «Argies» bailamos sobre las tumbas británicas. ¿Que dirá el pueblo inglés sobre lo que está haciendo su gobierno al enviar a sus pobres a pelear las guerras de los ricos mientras siguen sumergidos en la peor crisis económica de las ultimas décadas?».