Cerca de 19 millones de venezolanos están llamados a decidir hoy si Hugo Chávez y la Revolución Bolivariana se quedan seis años más, o si a la tierra de Simón Bolívar le llegó la hora de un cambio a manos del opositor Henrique Capriles Radonski. Chávez hace rato que dejó de ser un protagonista únicamente de la realidad venezolana y extiende su influencia en Sudamérica y el Caribe, por lo que la elección tiene interés internacional
Con la suerte de Chávez en las urnas, se juega la chance de un proyecto de izquierda, avalado una y otra vez en las urnas, durante 14 años.
Chávez llega a la compulsa tras haber logrado, en febrero del 2009, una enmienda constitucional que habilitó la reelección ilimitada, y si bien no debió afrontar ningún proceso interno, jugó una pulseada más compleja: a mediados del año pasado se le detectó un cáncer, por el que fue intervenido y tratado en La Habana, Cuba.
Fronteras adentro y ayudado por la excelente renta petrolera, Chávez, de 58 años, mantuvo una tarea de indiscutible corte social con una serie de planes (misiones) que apuntaron a sectores históricamente ignorados por quienes mandaban en el Palacio Miraflores: los jóvenes, los adultos de la tercera edad, las franjas más postergadas y los trabajadores.
Le jugó en contra cierta burocratización en algunas de las puestas en marcha de esos planes sociales, una tasa de inseguridad que no paró de crecer, casos de corrupción en capas medias de la administración, una alta inflación y el desgaste lógico que suponen 14 años como presidente.
Pero, además, en estas elecciones juega un papel destacado la existencia de una oposición que entendió que no había forma de derrotar al mandatario sin aliarse y que se encolumnó fervientemente detrás del candidato Capriles Radonski, quien se impuso en febrero pasado a otros cuatro aspirantes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), en elecciones internas.
Desde entonces, se propuso visitar varias veces cada estado, e inició una intensa campaña que lo llevó, en algunos casos, a tener tres actos por día.
También se presentan, sin chances, Orlando Chirino, por Socialismo y Libertad; María Bolívar, por el Partido Democrático Unidos por la Paz; Reina Sequera, por Poder Laboral; y Luis Reyes, por la Organización Renovadora Auténtica.
A Capriles lo respaldan Un Nuevo Tiempo Contigo, Primero Justicia, Movimiento de Integridad Nacional, Unidos para Venezuela, Vanguardia Popular, Fuerza Liberal, Democracia Renovadora, Nosotros Organizados Elegimos, Claridad Ciudadana, Avanzada Progresista y Movimiento Ecológico por Venezuela, entre otras fuerzas.
Chávez llega a la pulseada como candidato del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), al que se sumaron 10 organizaciones, integrantes del Polo Patriótico.