La Cámara de Diputados inició este mediodía la sesión especial en la que tiene previsto debatir los tres proyectos de reforma judicial que ya cuentan con media sanción del Senado, luego de que el oficialismo consiguiera que 132 legisladores, entre propios y aliados, se sentaran en sus bancas.
Entre los aliados al FpV que aportaron al quórum están los siete integrantes del Frente Cívico por Santiago que responden al gobernador Gerardo Zamora, cuatro de Nuevo Encuentro, los tres del Movimiento Popular Neuquino, y los dos de PJ La Pampa.
También se sentaron en sus bancas algunos legisladores que se conforman monobloques como María Cristina Fiore Viñuales (Renovador de Salta); Walter Wayar (Frente Peronista Federal); Alfredo Olmedo (Salta Somos Todos) y Mariana Veaute (Frente Cívico Catamarca)
Pese a que sufrió algunas bajas, el kirchnerismo no requirió -al menos para el quórum- la presencia del actual titular del AFSCA, Martín Sabbatella, algo que el jefe de bloque Agustín Rossi, había anticipado que podía ocupar su banca. Entre las ausencias más destacadas están el riojano Jorge Yoma, y los de extracción sindical surgidos desde la CGT disidente, Facundo Moyano y Omar Plaini, y la esposa del gobernador de Santa Cruz, Blanco Blanca de Peralta. A la hora del quórum tampoco se vio a la bonaerense Mable Müller (FPV), Julio Ledesma (Corriente de Pensamiento Federal) y Jorge Garramuño (Partido Federal Fueguino).
El inicio de la sesión estuvo marcada por fuertes discursos y cruces entre los legisladores. Uno de los momentos más tensos fue el que protagonizaron las diputadas Diana Conti (FpV) y Elisa Carrió (Coalición Cívica), que terminó con un exabrupto de la legisladora kirchnerista. (Ver video)
Por su parte, el radical Oscar Aguad consideró que con la reforma «vamos camino al chavismo» y reiteró que «estas leyes son inconstitucionales». «Esta ley está hecho para resolver el problema que tiene el Gobierno con la Justicia», sostuvo.
Y luego agregó: «Si ustedes no paran este atropello lo hará la gente en las urnas, en las calles». Para rematar el concepto, y haciendo referencia a la masiva movilización del pasado 18 de abril, Aguad dijo el Gobierno «no le tiene miedo al pueblo que viene con choripan, con micro, con dádivas».
Por su parte, la diputada Margarita Stolbizer ratificó el rechazo del Frente Amplio Progresista al proyecto para la elección popular de los miembros del Consejo de la Magistratura, al asegurar que es «inconstitucional», que «carece de legitimidad necesaria por toda la comunidad académica, jurídica, social y de base» y porque «va a aumentar la dependencia de los jueces».
«No dejamos de salir del asombro de la arremetida oficialista para definir en días, casi en horas, una reforma tan estructural, tan profunda, que a nuestro juicios se lleva puesto parte de nuestro sistema institucional», lanzó.
Otro que tomó la palabra fue Pablo Tonelli, del PRO, quien señaló: «Ojalá esta ley tenga vida efímera, porque es un retroceso».
La bancada de diputados del kirchnerismo buscará hoy convertir en ley los proyectos de regulación del dictado de medidas cautelares y de creación de tres Cámaras de Casación, luego de haber emitido ayer los respectivos dictámenes de comisiones respaldando los textos aprobados por el Senado.
Estas dos iniciativas serán debatidas en la sesión especial en la que, además, se tratará el proyecto que propone la elección a través del voto popular de los miembros del Consejo de la Magistratura, que con modificaciones será girado en revisión al Senado que lo convertirá en ley, junto a otros proyectos, el 8 de mayo.
Ayer, el Gobierno cedió dejarle a la Corte Suprema el manejo del presupuesto judicial, que en origen se transfería al Consejo de la Magistratura, y dio marcha atrás con la obligación de concursar a los funcionarios y secretarios de rango en el Poder Judicial, de manera que los magistrados pudieran continuar nombrando a su personal de confianza sin quedar presos de la lista de mérito que propone la reforma para el ingreso de empleados.
Tras acordarse esas modificaciones, la diputada Elisa Carrió denunció un «pacto» entre el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, y la presidenta Cristina de Kirchner, acusación que no encontró eco en el resto del arco opositor.
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Así, en la sesión que se inició este mediodía y que finalizaría mañana, se convertirían en ley el proyecto que regula las medidas cautelares y otro que crea tres nuevas Cámaras de Casación en los fueros Contencioso Administrativo, Civil y Comercial y Laboral.
Los tres proyectos se debatirán en el pleno del cuerpo tras la emisión de los respectivos dictámenes en una extensa reunión donde se cruzaron acusaciones el oficialismo y la oposición, que mostró sus fisuras y eso quedó demostrado en la cantidad de despachos que impulsaron las bancadas opositoras.
Para la sesión de hoy el oficialismo logró reunir el quórum de 129 legisladores. Cabe destacar que para el caso particular del proyecto referido al Consejo de la Magistratura se requieren al menos 130 manos alzadas para aprobarse. Pero según el diputado ultra K Carlos Kunkel, el oficialismo tendrá más de 135 votos positivos para la sanción de las normas.