La tirantez, la crueldad y hasta las mentiras que suelen envolver a un proceso de divorcio dejan huellas dolorosas en la vida de sus protagonistas. Por un lado la madre, por otro el padre y, en el medio, como rehenes de la relación, los hijos. El grupo de Padres y Abuelos por los niños separados de sus familias (Payab) se manifestó ayer en los Tribunales provinciales para expresar su descontento por el proceso de “discriminación” que sufren, en mayor medida, los hombres durante y después de la separación.
El coordinador de Payab Rosario, Fernando Taborda, explicó a El Ciudadano que en cada proceso de divorcio “los padres son los que tienen la mayor desventaja, sufrimos discriminación y prejuicios desde la primera audiencia y por eso tenemos que conformarnos sólo con ver a nuestros hijos 4 días del mes”. Esta modalidad denominada 26/4 (26 días que el niño o la niña convive con su madre y cuatro que pasa con su padre) es un régimen que ya en Europa están intentando desterrar. “Desde hace años en España se lucha contra esta modalidad, que no beneficia a nadie, donde el padre no puede ejercer su rol como tal en sólo cuatro días al mes. Desde el año pasado se comenzó a tratar en Brasil y este año está tomando terreno en Argentina”, agregó Taborda.
El 26
El 26 es el número que marca el presente y el futuro de los padres divorciados. “Al estar con nuestros hijos sólo 4 días a la semana no podemos aportar a su educación, a su desarrollo como persona, a su crianza. Esta discriminación ante la ley debe terminar ya, sobre todo por un presente y un futuro óptimos para nuestros niños, que podrán crecer al lado de sus padres, no sólo de su madre y de un señor que comparte con él cuatro días”, enfatizó.
Asimismo, Taborda lamentó que muchos de los padres que se unen al grupo para contenerse, para conocer más sobre su situación en niveles legales y para aunar fuerzas en el destierro de la fórmula 26/4, “hayan visto aletargado su proceso, hayan padecido denuncias falsas” y, por ende, bajaron los brazos.
“La Justicia es muy cruel con los padres porque, gracias a informes del Conicet, se sabe que los dos tercios de las denuncias elevadas por la madre durante la lucha por la tenencia del niño son falsas”, apuntó Taborda.
Los objetivos
Con esta iniciativa los padres y abuelos reunidos en Payab buscan “agilizar los procesos judiciales, equiparar los derechos de los progenitores con tenencias compartidas o crianza equitativa de los hijos. Esto requerirá mayor participación del padre”, indicó Taborda.
Actualmente el Payab está trabajando en 20 casos, entre los que se destacan obstáculos como el traslado de los hijos a 300 kilómetros del hogar original, acusaciones por abandono de hogar y denuncias “falsas” de todo tipo. “En los únicos casos en los que el padre tiene la tenencia del niño es cuando existen problemas de salud, psíquicos de la madre o bien que represente algún tipo de riesgo para la vida del niño; fuera de eso, apenas entramos a un tribunal llevamos todas las de perder, porque sí”, concluyó el referente de Payab.
