Luego de la inédita e histórica definición por penales que protagonizaron anoche Newell’s y Boca, el héroe de la noche, Nahuel Guzmán, habló sobre el primer penal pateado en toda la serie. «Hace dos días que tenía decidido quedarme en el medio si pateara Riquelme», contó.
El arquero de la Lepra relató que tenía escondido un papel/machete en una media para el sexto o séptimo penal “porque había chicos que no conocía”. “A Chiqui Pérez lo tenía como ‘aguantar hasta el final’. Estaba convencido de que lo ganábamos. No sé si era parte de la misma intuición del penal de Román, pero estaba convencido. Los chicos me dijeron que en ningún momento se les pasó por la cabeza que quedábamos afuera», detalló.
Minutos antes de iniciar la serie de penales, el entrenador de Newell’s les dirigió unas palabras y Guzmán se encargó de contar los detalles: «El Tata nos dijo que nos quedáramos tranquilos que ya el trabajo estaba hecho y habíamos hecho bien las cosas».
Por otro lado, el guardameta rojinegro habló de la buena relación y amena charla con Agustín Orión (arquero de Boca) mientras se iban ejecutando los penales. «Hablábamos y nos jodíamos mutuamente. Le comenté que yo atajaba dos y él me respondió que atajaba tres. Entonces le respondí que quedábamos afuera, pero le dije que le atajaba un penal a Román (Riquelme). En el partido se ve la conversación y se notó que yo le decía eso, estaba con confianza», manifestó.
Y agregó: «En el penal de Martín (Tonso), Agustín me dijo, muy seguro y confiado, que lo atajaba. Ese fue el momento que dudé si seguíamos. Ese fue el penal que la tocó y luego entró».