El Sindicato de Camioneros confirmó que a las 10 de la mañana el sindicato anunciará la realización de un paro nacional del transporte de carga para «el lunes o miércoles», en reclamo por el impacto del Impuesto a las Ganancias sobre el aguinaldo; al insistir con que «se comió» el medio aguinaldo de los trabajadores del sector, que en algunos casos llegó a «3.000 pesos».
Además, volvió a criticar a la presidenta Cristina Fernández, a la que calificó como «soberbia» porque no da marcha atrás con el gravamen, a la vez que le reclamó que deje de implementarlo en los sueldos y cobre impuestos a la actividad de «los bancos». Asimismo, advirtió que «otros gremios» también declararán paros «en los próximos días», porque «la gente explotó» de furia con la quita.
«La medida se confirmó: un paro nacional de 24 horas con movilización. Estamos viendo si se realiza el lunes o el miércoles. Lo decidiremos esta mañana y lo comunicaremos a las 12 en una conferencia de prensa», dijo el secretario adjunto del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, a la vez que añadió «La medida de fuerza incluirá, a las 18 ramas de camioneros, entre las que se encuentran caudales, combustibles, basura y gaseosas”.
El gremialista aseguró que «la gente explotó de furia ayer», cuando se acreditó el medio aguinaldo, «porque cobraron 10, 50 ó 100 pesos» por ese concepto. «Hay compañeros que perdieron hasta 3.000 pesos porque se lo comió el Impuesto a las Ganancias», se quejó. «La soberbia tanto de la presidenta como la del ministro de Trabajo, Carlos Tomada, de no escuchar un legítimo reclamo de los trabajadores lleva a esta consecuencia: a un paro nacional. Y, seguramente, otros gremios en los próximos días van a seguir la misma medida porque este impuesto afecta a millones de trabajadores», sostuvo en diálogo con radio Mitre. Moyano manifestó que, «entre la inflación, el Impuesto a las Ganancias y las asignaciones familiares que no se le pagan a los trabajadores por cobrar un poco más del tope que impone el Gobierno, hay camioneros que no quieren trabajar los fines de semana, los feriados ni hacer horas extras porque se trabaja para pagar al Estado». «Se podría poner impuestos a los bancos y a otros sectores que se beneficiaron muchísimo con este modelo», concluyó.