Con un fuerte operativo policial, que incluyó 250 efectivos, y control de ingreso al edificio se esperó la lectura del veredicto en el juicio que se llevó adelante en el Centro de Justicia Penal por una seguidilla de balaceras que iniciaron en 2018 tras conocerse la condena al grueso de la banda de Los Monos por asociación ilícita. Fueron siete las personas enjuiciadas entre ellas Ariel Máximo «Guille» Cantero sindicado como el instigador de al menos 7 de los 14 ataques armados que se le adjudicaron al grupo, que se iniciaron cuando un juez decidió cambiarlo de lugar de alojamiento, e incluyeron domicilios particulares vinculados con funcionarios judiciales y edificios de ese poder del Estado. Por unanimidad el tribunal resolvió condenar a los acusados a penas que van desde los 22 años a los 7 años. En algunos casos las penas fueron unificadas con condenas anteriores; por ejemplo en el caso de Daniel «Teletubi» Delgado (sentenciado por una participación necesaria en el triple crimen de Villa Moreno cometido en enero de 2012) deberá purgar 33 años y medio de prisión; Guille Cantero no escapó a esta situación y sumó una condena más a su haber, con lo que ya acumula sentencias por 84 años de cárcel en los últimos años, sólo una de ellas cumplida, y el resto aún no está firme.
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Con barbijo verde, Guille Cantero se sentó frente a la cámara escoltado por dos penitenciarios en su lugar de reclusión, en la cárcel federal de Marcos Paz. Esperó allí la aparición del tribunal integrado por los jueces Hebe Marcogliese, Pablo Pinto y Rafael Coria. En la sala también estaban los fiscales Miguel Moreno, Matías Edery, Gastón Ávila y Anibal Vescovo, quienes llevaron adelante la acusación, y los defensores de los acusados.
Además presenció la lectura el resto de los acusados: Teletubi Delgado, Damián «Colombiano» Chávez, Lucía Uberti, Leonel Fernández, Matías César, Leandro “Chulo” Olivera, son los otros integrantes del grupo condenados.
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Diez minutos después de la hora señalada, verificada la presencia de todas las partes, Marcogliese dio lectura al veredicto tras una introducción donde explicó, en nombre del tribunal, que la Fiscalía presentó una causa compleja donde se advierte que los atentados iniciaron entre el veredicto a la banda de Los Monos y el traslado de Guille Cantero, dispuesto a fines de mayo de 2018 por la Justicia federal, hacia una unidad de esa jurisdicción en el Chaco y el 11 de septiembre de ese año con la detención de Lucía Uberti y Matías César.
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Los objetivos de los ataques fueron distintos domicilios de funcionarios judiciales, señaló. Se determinó que estas propiedades estuvieron vinculadas con dos de los magistrados que dictaron sentencia condenatoria contra la banda de Los Monos y dos de los camaristas que revisaron la sentencia. También contra la sede fiscal de calle Montevideo al 1900, el Centro de Justicia Penal, la sede de la Policía de Investigaciones, donde un chico de 14 años arrojó una granada lacrimógena en compañía del Colombiano Chávez, y domicilios de dos comisarios que intervinieron en la investigación al grupo delictivo.
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Los jueces resolvieron condenar a Guille Cantero a 22 años de prisión, dos menos que el pedido de Fiscalía, por 7 de los hechos en carácter de instigador. Entre ellos, dos domicilios vinculados con el juez Ismael Manfrín y cuatro de su par Usandizaga, además de un ataque armado al Centro de Justicia Penal. Esta sanción se unificó con una condena previa 6 años y 8 meses por coaccionar a otro juez, por lo que el total fue de 28 años y 8 meses. Esta condena se suma a las sentencias previas que aún no están firmes, cuatro, por lo que en una suma rápida el monto alcanza los 82 años y 8 meses.
Matías Nicolás César fue condenado por 9 ataques armados a 20 años de prisión. Su entonces pareja Lucía Uberti recibió la misma sanción penal y no se hizo lugar al pedido de prisión domiciliaria, por lo que seguirá tras las rejas.
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Teletubi Delgado fue condenado en calidad de instigador en relación con cuatro de los hechos a 12 años y medio, lo que se unificó con la sanción de 21 años dictada en la causa donde se ventiló el triple crimen de Villa Moreno por lo que deberá purgar 33 años y medio de cárcel. Además fue declarado reincidente.
Chulo Olivera fue condenado por tres hechos en calidad de partícipe primario. Le impusieron una sanción de 11 años de prisión. Para Chávez la pena fue de 7 años de prisión por el ataque ocurrido en Lamadrid 550, sede de la ex PDI, mientras que Leonel Alejandro Fernández fue condenado por la balacera a la sede de la fiscalía en calle Montevideo al 1900 a 8 años de cárcel.
El abogado de Guille Cantero cuestionó la figura de instigador y las condiciones de detención
