El gobierno nacional había informado, a través del Indec, que la balanza comercial argentina había cerrado 2016 con superávit. Ayer, el Ministerio de la Producción de la provincia y la Federación Industrial de Santa Fe difundieron el informe final del Observatorio de Importaciones –con los datos de diciembre incluidos–, que no desmiente aquella información, pero la pone en contexto.
Según el Observatorio santafesino, las importaciones bajaron –en términos generales–, pero este fenómeno se debió al efecto de la recesión y de la paralización de la industria local.
Sin embargo, hubo un aumento en las importaciones de bienes de consumo –muy significativo en el rubro alimentos– que afectó fuerte a la industria y la producción de la provincia.
Maquinaria agrícola, vehículos, muebles, hierro, acero, pelotas de fútbol, productos de ferretería, textiles, electrodomésticos, alimentos y golosinas son algunos de los rubros afectados por la apertura de las importaciones.
El informe suscrito por el Ministerio de la Producción y la Federación Industrial de Santa Fe compara los datos de las importaciones –en unidades– de 2015 con los de 2016. Para el análisis, se consideraron los productos industriales y de origen primario elaborados en la provincia de Santa Fe, que desde la eliminación de las barreras aduaneras se encuentran en desventaja para competir con los productos importados.
Para el ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani, la política de comercio exterior del macrismo va a terminar destruyendo el empleo y la industria nacional.
El gobierno de Cambiemos había justificado la eliminación de las trabas a las importaciones señalando que de ese modo iban a bajar los precios en el mercado local, lo que finalmente no ocurrió. En declaraciones a Rosario3, el ministro Contigiani observó que “eso lo enseñan en los libros y queda muy lindo”, pero aclaró que “en la Argentina nunca funcionó”.
“Imposible competir”
“Ninguna pequeña o mediana empresa puede competir con productos importados. Para competir con bienes industriales finales de otros países tenés que tener costos sistémicos parecidos al mundo. No te digo a Asia, porque ya no se puede competir; apunto a Brasil. ¿Cómo hacés que compitan si acá tenemos la energía y los combustibles más caros de la región?”, indicó Contigiani.
A pesar de que la balanza comercial fue superavitaria en 2016, el ministro de la Producción remarcó que bajaron tres ítems –combustibles, bienes intermedios y piezas para bienes de capital– y que subieron las importaciones de productos finales que impactaron en la provincia y en particular en la región de Rosario: línea blanca, heladeras (un 250% más que en 2015: un total de 10 mil unidades), calzados, metalmecánica, maquinaria agrícola y alimentos. “Todo esto en un contexto de recesión”, subrayó el funcionario provincial.
Consultado por la política económica de la Nación, Contigiani concluyó: “El capitalismo que ellos abrazan hoy es más proteccionista, como en el caso de Estados Unidos con Donald Trump. En el fondo, no creen en una Argentina industrializada. Para ellos lo más barato es traer todo de afuera. Ahora, que me digan qué hacemos con los millones de personas que quedan afuera de las oportunidades económicas y de integración”.
En 2016, se produjo una invasión de silos brasileños
En 2015, se habían importado 145 silos y 448 silos sin mecanizar. En 2016 fueron 173 y 517, lo que arroja una suba del 19,3 y del 15,4% respectivamente. En gran parte, los silos importados llegan desde Brasil a precios menores.
Hoy habrá una reunión en Buenos Aires donde los empresarios del sector analizarán la situación. Estará el titular del Observatorio de Importaciones de Santa Fe, Sergio Buchara.
Según adelantaron desde el Ministerio de la Producción de la provincia, algunas medidas que se van a plantear en la reunión para luego elevar al gobierno nacional son un aumento en los aranceles de importación, que se revean los costos internos y créditos para la compra de los silos nacionales.
En tanto, entre 2015 y 2016, las importaciones que más aumentaron fueron las siguientes: zanahorias, 144.622%; naranjas 20.404%, exhibidoras, 1.794%; pollos trozados, 891%; queso crema, 541%; cebollas, 408%; sommiers, 328%; y bondiola, 251%; entre otros.
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