Hace cuatro años investigadores federales desbarataron una ambiciosa operación de tráfico de cocaína traída a Rosario desde el norte el país, previo despacho desde Bolivia. Fueron 100 kilos los incautados, los primeros 50 se secuestraron a la altura de la localidad de San Genaro, y el otro medio centenar en Salta, antes de que el cargamento fuese enviado. Quien comandaba ese engranaje de distribución era Walter Daniel “Dani” Jure, de 41 años, un hombre que ya contaba con una condena por narcotráfico y otra en la megacausa provincial que tuvo en el banquillo a la banda de Los Monos. En un juicio que comenzó a mediados de junio, Dani Jure fue condenado a 12 años de prisión como organizador de la banda. También fueron sentenciados su hermano Diego, un ex comisario de la seccional 19ª –quien ofrecía cobertura a la banda– y otras once personas, entre ellas cinco salteños. El veredicto dictado por el Tribunal Oral Federal 3 –integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Jorge Martínez Ferrero y German Sutter Schneider– se conoció este viernes cuando los hallaron responsables de esa operatoria frustrada y de valor millonario.
Desde las 11 de la mañana, unas 20 personas, entre ellas familiares de los imputados, aguardaban fuera de los Tribunales Federales de bulevar Oroño al 900 para anoticiarse del veredicto. Dentro, tres de los acusados, incluido Dani Jure, esperaban rodeados de efectivos penitenciarios y de Prefectura. Los otros once siguieron el debate por videoconferencia desde el penal de Ezeiza.
La resolución de los jueces es apenas diferente a las penas solicitadas por el fiscal general de juicio Federico Reynares Solari.
–Walter Daniel Jure recibió la condena más alta: 12 años de prisión como organizador de tráfico de estupefacientes, en las modalidades de tenencia con fines de comercialización y transporte, agravado por haberse cometido con la concurrencia de tres o más personas en forma organizada, en carácter de autor. Además se le impuso una multa de 30 mil pesos.
–Diego Fernando Jure, quien fue declarado reincidente, recibió 9 años de prisión como coautor del delito de tráfico de estupefacientes. Esa misma pena recibieron Germán Ramírez y Francisco “Chamigo” Polanco, nacido en Paraje El Sauzal, Salta.
–Daniel Hernán Vera (Tartagal – Salta) y Guillermo Miguel “Pipena” Rodríguez, en tanto, purgarán 8 años de prisión.
–Leonardo Ariel Carrizo, Jorge Omar Vera y Moises Alejandrino Maldonado (estos dos últimos oriundos de Tartagal) recibieron 7 años de prisión.
–Alberto Rojas (Tartagal), Gisela Estefanía González y el comisario Carlos Alberto “Gringo” Schmidt deberán purgar 6 años. En el caso del policía, la condena fue agravada por ser funcionario, dijeron los jueces. Además no podrá ocupar cargos públicos por el mismo lapso.
–La joven Marina Beatriz Cardozo, presente en los Tribunales, recibió tres años de prisión condicional como partícipe secundaria, y deberá cumplir reglas de conducta además de pagar una multa de 1.000 pesos.
Quien resultó absuelto por el beneficio de la duda y salió caminando de los tribunales tras escuchar el veredicto fue Darío Blas Grossi, quien estaba sentado junto a Dani Jure en las bancas reservadas al público.
La causa que llegó a juicio
En junio de 2015, el ex fiscal federal Mario Gambacorta comenzó una investigación como desprendimiento de la causa federal por drogas de Miguel Lotufo sindicado como proveedor de drogas sintéticas, que fue condenado a seis años y medio junto a la hermana de Esteban Alvarado, Yanina, en marzo pasado. Esta nueva pesquisa, tenía como objetivo desbaratar a una organización que se dedicaba al comercio y tráfico de cocaína, la cual llegaba a Rosario desde Salta a través de la ruta nacional 34.
El 9 de octubre de 2015, el personal de Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detuvo en la ruta 34, a la altura de la localidad santafesina de San Genaro, una camioneta Chevrolet Meriva conducida por Daniel Vera, la cual transportaba 53 kilos de cocaína disimulados en piñatas de colores.
Cerca de allí, también se interceptó un Volkswagen Bora en el que fueron apresados Jorge Omar Vera, Alberto Rojas y Moisés Alejandrino Maldonado, quienes quedaron señalados por la Fiscalía federal como los proveedores de la cocaína y a unos kilómetros fue atrapado Francisco “Chamigo” Polanco cuando se movilizaba en un Suzuki Swift.
La hipótesis de la Fiscalía, que luego refrendó el Tribunal dictando condenas altas, es que Chamigo era el contacto de Dani Jure que unos días antes había estado en la localidad salteña de General Güemes para comprar la droga, ingresada al norte argentino desde Bolivia.
Ese mismo día, también cayó Dani Jure cuando lo detuvieron en la ruta mientras caminaba, porque quien lo debía pasar a buscar ya había sido detenido por la PSA.
En tanto, los otros 50 kilos de cocaína fueron secuestrados en Salta y se formó una causa en esa jurisdicción.
Las escuchas que fueron aportadas como pruebas de la acusación en el debate oral dieron cuenta que Dani llamó a Germán Ramírez –también condenado– porque quien debía pasar por él no llegaba.
– “Este muchacho no me contesta el teléfono. Me dejó acá esperándolo al primo de él y estoy acá, boludo. Ya hace un rato largo estoy y encima lo llamo y no me contesta, boludo”, fue la última escucha que se registró antes de ser arrestado.
De acuerdo con la investigación, Diego Jure, hermano del cabecilla de la organización, se encargaba de la distribución local de estupefacientes.
La charla del comisario
Schmidt era el jefe de la seccional 19ª, ubicada en bulevar Seguí 5365 de la zona oeste, cuando Dani Jure le pidió a un lugarteniente, Guillermo “Pipena” Rodríguez, que fuera hasta la comisaría y se lo pusiera al teléfono.
De acuerdo con la acusación, el Departamento de Interceptación y Captación de las Comunicaciones (Dicom) que interceptó el siguiente diálogo:
Jure: “Yo le digo al pibe (…) que te pase lo adeudado y que después… dejame un número de teléfono ahí”.
Schmidt: “Dale, dale”.
El comisario le devuelve el teléfono a Pipena y Jure le ordena: “Sacá 8 lucas de ahí ¿Tenés 8 lucas ahí? Bueno, sacá 8 lucas y dale al hombre … ahí le dije que me deje un número de teléfono que te lo pase a vos personalmente”.
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