Tras la frustrada sesión del viernes en la comisión de Presupuesto y Hacienda y la decisión de pasar a cuarto intermedio hasta mañana, la oposición en el Concejo Municipal se mostraba ayer más confiada de poder aprobar proyecto de presupuesto 2014 con modificaciones en cuanto a la actualización del valor de la Tasa General de Inmuebles (TGI). En ese sentido, especularon con que el oficialismo finalmente desista con el revalúo de terrenos y presente mañana una propuesta que esté en mayor sintonía con lo planteado por las otras fuerzas, en particular el Partido del Progreso Social –con Héctor Cavallero a la cabeza– la Unión Cívica Radical –el sector no frentista que encabeza Jorge Boasso– y el Frente para la Victoria, cuyo acompañamiento –sumando al justicialista Osvaldo Miatello– significarían 9 votos clave para que las cuentas municipales para el año que viene queden cerradas antes de la Navidad de éste.
En la última reunión, que duró aproximadamente 14 horas y que concluyó ayer en horas de la madrugada, no se pudo arribar a un acuerdo en lo que refiere a la actualización de la taza que se aplica en concepto de servicios brindados por el municipio a los vecinos.
El Frente Progresista aceptó y presentó el viernes una propuesta elaborada por el PRO –una bancada de 5 ediles, la mayor fuerza propia en el Palacio Vasallo– que estipulaba el revalúo dominial con un tope fijado en el 19,5 por ciento, algo que fue rechazado de plano por el resto la oposición. Este último sector pretendía desterrar el revalúo para avanzar, en cambio, en una actualización de la TGI de acuerdo al índice inflacionario, con un tope y estableciendo una diferenciación de acuerdo a la zona en la que se encuentre ubicado el inmueble.
“La intención era generar una especie de actualización automática con una revaluación inmobiliaria que en los próximos años generaría valores altísimos de la Tasa. Eso es un engaño, ya que no debe estar ajustado de acuerdo al valor del mercado inmobiliario, que es el más inflacionario del país”, consideró en diálogo con El Ciudadano el edil del bloque Radical Sebastián Chale.
En igual sentido, el edil Cavallero, también planteó que la propuesta del macrismo “generaría, en algunos casos, un incremento del 800 por ciento” en el valor de la TGI.
El revalúo se efectúa a partir de la cotización del valor del terreno, sumado al valor de la propiedad, a precios de mercado. Esto a su vez, se ve modificado por diversas variables: calidad constructiva, que se establece en una escala entre 1 y 10; ubicación, que se divide en seis secciones; calle y altura de la calle donde desemboca el terreno, entre otras variables. De este modo, habitantes de zonas que hayan sufrido significativos cambios de urbanización en los últimos años podrían comenzar a abonar un valor que es, según especificaron legisladores locales, en algunos casos hasta ocho veces mayor a la actual.
“Si bien se establecieron topes para los próximos tres años, una vez transcurrido ese tiempo se generará un aumento del impuesto inmobiliario exorbitante e incalculable, porque era totalmente indescifrable ver hasta cuánto podría llegar”, interpretó Chale, para quien el revalúo significa un “impuestazo encubierto”.
Por otro lado, se refirió a la condición del PRO para aprobar la iniciativa que planteaba el congelamiento del pase a planta permanente de agentes actualmente contratados, becarios, pasantes y con locación de servicios en todas las áreas de la Municipalidad, con excepción de la Secretaría de Salud. “Esto iba a generar precarización laboral, porque no especificaba que no se podía contratar nuevo personal en negro. Por lo tanto, los precarizados actuales no iban a poder pasar a planta, mientras que la Intendencia, si seguía contratando gente, debía hacerlo en negro”, explicó.
De todos modos, reconoció que la extensión del debate, que ya parece no tener fin, es porque “el presupuesto es el plan de gobierno, la madre de todas las ordenanzas” por lo que no comparte que el debate sea breve. “Necesita análisis, discusión. Así funciona la democracia”, agregó, mostrándose confiado de que el oficialismo finalmente desistirá con el revalúo.
En concordancia con esto último, Cavallero insistió: “Nosotros proponemos una actualización de acuerdo al índice inflacionario con un tope del 19,5 por ciento por radio, es decir, hay lugares que no van a pagar prácticamente nada, mientras que los más altos (Puerto Norte) abonarán un porcentaje más alto que permitirá, en promedio, llegar a ese porcentaje”.
En última instancia, reconoció que aprobando un presupuesto se contribuye “no sólo en cuanto a gobernabilidad, sino también en lo referido a la previsibilidad”, aunque consideró necesaria una modificación del proyecto para no impactar con tanta dureza en el bolsillo. “La condición nuestra para aceptar es que no se contemple el revalúo y que (el aumento) sea sólo por el año 2014”, concluyó.