La evaporación de las reservas de libre disponibilidad, es decir las que se ubican por encima de la base monetaria, planteará al gobierno una serie de alternativas para encarar los vencimientos de la deuda con acreedores externos en 2012, entre éstas la modificación dela Carta Orgánicadel Banco Central y continuar con los controles al mercado de cambios.
La deuda pública en manos de acreedores privados y organismos internacionales equivale a sólo 18,3 por ciento del PBI, del cual un tercio es en moneda local, según cálculos de la consultora Econométrica. Sin embargo, el costo de financiarse en los mercados internacionales es alto parala Argentina. En2011, el riesgo país –diferencial de tasa entre los bonos soberanos y similares de los Estados Unidos– saltó 92,5 por ciento hasta los 920 puntos básicos.
Así, el gobierno optó por financiarse con dependencias estatales, entre éstas el Banco Central. Un documento de la consultora Economía y Regiones (E&R) calculó que la autoridad monetaria cubrió en 2011 el 61 por ciento de las necesidades de financiamiento del Tesoro dela Nación: de este porcentaje, el 75 por ciento se instrumentó en reservas, el 17 por ciento en utilidades y el 8 por ciento restante en adelantos transitorios.
El pago de deuda externa y el drenaje de depósitos en moneda extranjera de las entidades financieras provocaron una caída de 5.780 millones de dólares de las reservas internacionales en manos del Banco Central en el año, una cifra que sube a 6.289 millones desde los 52.654 millones del 26 de enero de 2011, cuando registraron el récord histórico.
Esta disminución no es un dato menor, porque el proyecto de Presupuesto 2012 aprobado en general en el Congreso incluye el pago de unos 5.700 millones de dólares de deuda externa con reservas de libre disponibilidad, pero estos recursos se agotaron desde mediados de noviembre. Según datos del Banco Central al 23 de diciembre último, la base monetaria ascendía a 213.129 millones de pesos, mientras las reservas internacionales eran de 198.640 millones de pesos (46.271 millones de dólares).
Frente a esta restricción de financiamiento por esta vía, la consultora E&R se planteó dos escenarios de balance de pagos, el mejor de los cuales contempla máximos controles del gobierno al giro de utilidades al exterior por parte de las empresas, una cuenta corriente equilibrada y una cuenta capital con superávit. En ambos escenarios, teniendo en cuenta una cancelación en efectivo de la mitad de las Letras y Notas del Banco Central, el tipo de cambio debería subir a 6,70 pesos por dólar para que el gobierno vuelva a contar con reservas de libre disponibilidad para cancelar los vencimientos en dólares del Tesoro de 2012 por 5.674 millones de dólares.
El informe económico descartó que la devaluación llegue a ese nivel en 2012, por lo que diagnosticó que existen dos vías –no excluyentes– para que el gobierno pueda echar mano a las reservas. La primera es que la autoridad monetaria aumente el pedido de préstamos al Banco de Pagos Internacionales (BIS) para “crear” reservas de libre disponibilidad. La segunda, una modificación dela Carta Orgánicade la entidad, una iniciativa que debería pasar por el Congreso, hoy con mayoría oficialista.
Precisamente, la presidenta del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont, instó en los últimos días a discutir una reforma ala Carta Orgánica.“Es una discusión que tenemos que dar. Es dejar en la letra legislativa lo que en definitiva se viene haciendo enla Argentina. Laletra dela Carta Orgánicafue escrita sobre la base de otro proyecto parala Argentina”, dijo.
Marcó del Pont hizo este llamado luego de que la entidad que dirige difundiera su Programa Monetario para 2012, que prevé un aumento de 26,4 por ciento de la base monetaria y la compra de unos 9.000 millones de dólares en el mercado de cambios. El programa recordó que el Presupuesto 2012 contempla el uso de 5.600 millones de dólares de reservas de libre disponibilidad para atender el servicio de la deuda pública, un recurso que hoy no se puede utilizar sin reformarla Carta Orgánica.