Seis candidatos presidenciales, titulares de bloques parlamentarios y autoridades de Senado y Diputados pertenecientes al núcleo opositor denominado Grupo A consensuaron un documento donde advirtieron que cuidarán “la democracia” y apuntaron contra las políticas del gobierno.
El documento está firmado, entre otros, por los precandidatos presidenciales Mauricio Macri (PRO), Elisa Carrió (Coalición Cívica), Ricardo Alfonsín y Ernesto Sanz (UCR), Eduardo Duhalde y Felipe Solá (Peronismo Federal).
Una de las ausencias más significativas en la firma fue la del vicepresidente Julio Cobos, aunque también se negaron a rubricarlo el Proyecto Sur de Fernando “Pino” Solanas y el Partido Socialista. Fuentes cercanas al titular del Senado afirmaron que el escrito llegó a su despacho y, si bien acompañó “todos esos principios porque son fundamentales para la democracia”, él debe “preservar su rol de vicepresidente”.
Quienes sí apoyaron fueron los legisladores Francisco de Narváez y Gustavo Ferrari (Peronismo Federal), Gerardo Morales, Ricardo Gil Lavedra, Silvana Giudici y Oscar Aguad (UCR), Federico Pinedo (PRO), Patricia Bullrich y Alfonso Prat Gay (Coalición Cívica) y el titular del radicalismo Ángel Rozas.
Encomendado por Macri, Pinedo fue el encargado de recoger las firmas de los otros integrantes del denominado Grupo A a partir de su trabajo combinado con otros legisladores de ese conglomerado: el radical Aguad, Bullrich , Ferrari y Gil Lavedra.
“Si esto tiene otras instancias va a depender de la actuación del gobierno. Lo que busca el documento es llamar la atención de la población sobre lo que se ha transformado en un comportamiento sistemático del gobierno para perseguir a los que no piensan como ellos”, sostuvo Pinedo.
Además, mencionó que “se utiliza la Justicia, la Policía, la Side, la Secretaría de Comercio en el caso de las consultoras que miden inflación, la Afip, la televisión pública y los medios públicos para atacar a todos los que no piensan como el gobierno, así que el objetivo es llamar la atención de que esto no puede ser”.
Macri había anunciado a principios de semana la búsqueda de “acuerdos de mínima” para pararse en forma coordinada frente a las políticas del kirchnerismo, pero “de máxima” habló de la posibilidad de armar un frente opositor para las elecciones de octubre.
Sin embargo, hubo algunos firmantes que pusieron como condición para hacerlo que no se interpretara como un acuerdo electoral y otros no quisieron sumarse precisamente para evitar ese tipo de interpretaciones.
En el escrito, calificado como un “acuerdo pétreo”, los firmantes se impusieron “como deber cuidar la democracia” y admitieron que “la libertad de expresión, la independencia del Poder Judicial y el cumplimiento de sus fallos” está “por encima de nuestras coincidencias y disidencias”.
Asimismo, aseguraron que unirán fuerzas “en un único eje” que será “no aceptar en silencio la persecución, el uso indiscriminado del poder, o la utilización de organismos del Estado utilizados fuera de su finalidad”.
“Los medios de comunicación, las empresas, los trabajadores, las consultoras privadas que miden la inflación o cualquier ciudadano, no deben ser penalizados por sus ideas o por el desarrollo de actividades lícitas que el gobierno considera inconvenientes para sus intereses”, dispararon.
“La democracia argentina debe ser cuidada y protegida de acciones de intolerancia, de persecuciones, de señalamientos, escraches o cualquier intento de discrecionalidad en el uso de los recursos que el mismo Estado posee. Los límites del Estado los define la constitución, no el poder gobernante”, agregaron.
A su vez, durante la jornada se evaluaron distintas maneras de reforzar este documento e incluso se charló entre los firmantes sobre la posibilidad de que confluyan en una foto los exponentes de primera línea. Sin embargo, la idea fue perdiendo peso con el correr de las horas y la poca disponibilidad de los responsables; incluso se trató de juntar a las “segundas líneas”, pero tampoco se consiguió.
El diputado del Peronismo Federal Gustavo Ferrari admitió que este documento “es un primer paso” y que no hay que apresurarse”. Sobre los próximos pasos de esta convocatoria, Ferrari dijo que continuarán con las rutinarias reuniones que lleva adelante con Pinedo, Aguad, Bullrich y Gil Lavedra.
“Los que se quieran sumar está muy bien. La gente nos pedía esto y hoy es una realidad; lo importante es que coincidamos en estos puntos básicos y a partir de ahora se verá”, concluyó.