El programa Hogar ya tiene un millón y medio de beneficiados. Así lo anunció el ministro de Economía, Axel Kicillof, en el marco de una conferencia conjunta con su colega de Planificación Federal, Julio De Vido.
Kicillof destacó «la premura y la eficiencia que ha tenido cada una de las dependencias del Estado, toda nuestra potencialidad informática para cruzar los datos rápidamente» e inscribir a los beneficiarios del Programa Hogar.
Dijo que el beneficio «pronto alcanzará a dos millones de hogares», de un universo estimado en cuatro millones, dado que “hay 500 mil trámites en curso, mientras otros 100 mil están anotados y sus datos tienen que cruzarse con la base de la Secretaría de Energía y la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses)”.
Se trata, aclaró, de “grandes consumidoras de garrafas en la Patagonia (La Pampa, Rio Negro, Neuquén, Chubut, Santa Cruz y Tierra del Fuego), donde hay situaciones diversas”.
Kicillof anunció además que se decidió la creación de un “registro especial de beneficiarios, para determinadas zonas con hogares de bajos recursos que no tienen buena conexión eléctrica ni de gas y problemas por el tipo de vivienda” “Para esas zonas se va a fijar un número mayor de garrafas de las pensadas en el programa Hogar, de modo que reciban el subsidio directo, aunque deberán declarar cuántas necesitan”, indicó.
El ministro de Economía estimó que “como máximo este registro va a representar el 2% del monto destinado al programa”, y anticipó que “esto es quirúrgico y milimétrico, para que nadie demande un número mayor de garrafas de las que necesita”.
El ministro recordó que “el subsidio se creó en septiembre de 2008, cuando recién estaba en curso el pase de las Afjp a la Anses, para reducir el precio de las garrafas al consumidor del lado de la oferta”.
Inicialmente, puntualizó, “había 14 empresas productoras y 230 fraccionadoras y distribuidoras que recibían el subsidio”, mientras ahora se deposita el monto directamente al beneficiario.
Kicillof rechazó luego las “campañas mediáticas” que critican el programa y recordó que “se invirtió la lógica con nuevos instrumentos, información y base de datos, que nos permiten llegar directamente al beneficiario”.
Por otra parte, el titular del Palacio de Hacienda señaló que desde la implementación del Programa Hogar se aplicaron 50 multas y clausuras por incumplimientos en el precio máximo de 97 pesos establecido para las garrafas, en distintos eslabones de la cadena.
Kicillof detalló que esas sanciones surgieron tras la realización de 150 inspecciones a fraccionadores y mayoristas, y 300 inspecciones en comercios minoristas en todo el país.
El ministro De Vido, por su parte, coincidió en que “antes no había padrones ni forma de llegar a la demanda de manera detallada y precisa como tenemos hoy”.
Advirtió luego que el cambio de metodología provocó cuestionamientos mediáticos que “apuntan a tratar de mantener el privilegio de 14 productoras y 230 empresas que se llevaban el subsidio”, lo cual “genera tensiones de intereses que son las que estamos viendo en operaciones mediáticas en los últimos días”.
De Vido resaltó que está próximo a iniciarse el segundo tramo del Gasoducto del Norte y a licitarse el tercero, en la zona de Corrientes y Misiones.
“En 18 meses más vamos a tener conectados a 3,5 millones de hogares, lo cual significa que se podrá eliminar el subsidio para un 33% del universo alcanzado”, concluyó el ministro.