El ex juez de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni cuestionó la marcha convocada por jueces y fiscales que se llevó a cabo el pasado 18 de febrero, y coincidió con el Gobierno al hablar de «partidización» de un sector del Poder Judicial.
«Esta partidización de la Justicia está arrojando basura sobre todo el poder Judicial. La gran mayoría de los jueces no tiene nada que ver con esta partidización. A la larga esta partidización desprestigia al Poder Judicial y le resta credibilidad pública», afirmó en declaraciones al programa «El fin de la metáfora», que se trasmite por FM Nacional Rock.
Por otro lado, rechazó las declaraciones de su ex colega y presidente del tribunal, Ricardo Lorenzetti, y señaló que «la causa de la Embajada (de Israel) no es cosa juzgada».
«La causa de la Embajada no es cosa juzgada. Recuerdo que un familiar hace año planteo la preocupación por la posible prescripción de la causa de la embajada pero nosotros resolvimos por unanimidad que dado que no había una sentencia definitiva que la causa quedaba abierta y no podía prescribir. Nos sabíamos la naturaleza del delito que se trataba pero como quedaba abierto para la posibilidad que fuera un delito de lesa humanidad», aseveró Zaffaroni.
En un discurso que brindó el martes pasado, Lorenzetti dijo que la Corte, en su anterior conformación, emitió una sentencia en la causa por la voladura de la embajada de Israel en 1999.
«Esa sentencia está publicada y consentida por las partes. No podemos modificar lo que ya ha sido aceptado y es cosa juzgada», agregó el presidente del máximo tribunal, lo que fue rechazado este domingo por su excompañero del tribunal Zaffaroni.
Por otra parte, sobre el pedido de apartamiento al fiscal Germán Moldes de la causa por encubrimiento a Irán en el atentado de la AMIA, iniciada por el fiscal Alberto Nisman, Zaffaroni sostuvo que «cada uno sabe, cada funcionario sabe cuál es el grado de compromiso y si tiene autonomía moral o de decisión para intervenir».
«Me parece correcto lo decidido por el juez Rafecas. Leí el contenido de la denuncia de Nisman (fallecido el 18 de enero) y no tiene absolutamente ningún fundamento, carece de fundamento. No es que carece de fundamento por un tema de la prueba porque se haría prueba sobre algo que no es delito. En último caso si se probase la veracidad de lo que dice Nisman podría ser motivo para pedir un juicio político pero no un juicio penal», aseveró.
Zaffaroni sostuvo que «el escrito es un disparate» y se declaró «seguro de que no lo hizo Nisman». «Solo se denuncia actos preparatorios. Es como se denuncie que estoy delante de la puerta pensando que voy a romper la puerta para entrar a robar. Los actos preparatorios son impunes», dijo.
Señaló que «un fiscal normalmente cuando hace una denuncia dice que viene a denuncia un delito» y que, en cambio, «desde el principio este escrito de Nisman dice que viene a denuncia un plan criminal y una confabulación», lo que «no significa un delito sino un acto preparatorio».
«Hay varias manos que se meten en ese escrito. Es muy reiterativo y no hay una sola remisión. En alguien que tiene experiencia no repite tanto, se nota que es un corte y pegue con la computadora. Nisman era un hombre de oficio, ni lo hizo ni lo redondeó», analizó Zaffaroni.
El penalista evaluó que «evidentemente Nisman estaba sufriendo una coyuntura totalmente desequilibrante» porque «alguien o algo lo desequilibraba», y señaló que «es totalmente desconcertante que deje dos escritos pidiendo al Poder Ejecutivo que haga algo y valorando lo que hizo, y otros escritos diciendo que es un plan criminal».
«Según la lógica política, la hipótesis es la de un homicidio. En mi inconsciente pienso que fue un suicidio porque me dolería muchísimo que la hipótesis política fuera verdadera, me costaría creer que haya ese grado de perversión. Me parece que la hipótesis política y criminalística en este momento no coincide», aseveró Zaffaroni.
Sostuvo que cree «que la doctora (Viviana) Fein está actuando bien» al frente de la investigación sobre la muerte de Nisman, pero señaló que la fiscal «no está acostumbrada a tener diez cámaras de televisión adelante».
Zaffaroni también se refirió a la propuesta de Roberto Carlés para ocupar su vacante en la Corte y al respecto señaló que «es un muchacho que tiene todas las condiciones para ser ministro» y que no le encuentra «objeciones».
