ABUSO Y VIOLACIÓN
La pregunta
que ya nadie
debería hacerse
Por Luciana Sosa @sosaluciana
EL CIUDADANO

Era el lunes 10 de diciembre de 2018. Alrededor de las 15, la sección Espectáculos del diario estaba casi cerrada y vimos una publicación que decía: “Actrices mañana dan una conferencia y denuncian por abuso”. A la par, un tuit de Jorge Rial anunciaba que el martes se iba a conocer el nombre de un famoso actor acusado de violación. De inmediato lo subimos a nuestra web y quedamos a la espera de la conferencia del martes. Esa mañana, en la redacción sonaba fuerte el nombre de Juan Darthés, se supo que su abogada defensora renunciaba y no sabíamos bien quién era Thelma Fardin, pero todo indicaba que ése sería el tema de la conferencia anunciada para las 19. No había más datos. Después de las 19 quedamos en shock. El video en el que la joven actriz relataba con detalles cómo Darthés la violó cuando ella tenía 16 años fue estremecedor y por varios días estuvimos hablando de eso. Incluso el viernes siguiente, cuando Darthés dio su testimonio en el programa de Mauro Viale la redacción se detuvo. Todos estábamos frente al televisor, escuchando atentos y viendo una muy mala actuación.


Fardin denunció que fue violada nueve años atrás, cuando ella tenía 16 y él 45, y era el único actor adulto que había participado de la gira de la serie infantil-juvenil Patito Feo en Nicaragua. Tras años de silencio y de quién sabe qué tormentas tras una experiencia así, Fardin buscó ayuda en la Colectiva Actrices Argentinas y realizó la denuncia penal en Nicaragua. Tras esa denuncia, se puede decir que desde el último 8M se vivió un año intenso y favorable para la lucha del feminismo, para la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y para la visibilización y las denuncias de casos de abuso y violación. Para el aprendizaje sobre el rol de la mujer en la sociedad, de la deconstrucción de hombres y también de mujeres (porque hay muchas mujeres que son machistas) y para repensar cómo se ha tratado y cómo se sigue tratando a las víctimas de abuso y violación. Porque a Darthés ya lo habían denunciado tres actrices: Calu Rivero, Anita Coacci y Naty Juncos. A ellas no se les había dado el espacio merecido, tal vez por prejuicio o porque del otro lado muchas empresas productoras, incluso la misma Pol-Ka, defendían al actor poniéndolo como protagonista de una de las tiras más exitosas de 2018: Simona.

Basta ya de minutos de miedo, de humillación, de dolor, de silencio. Tenemos derecho a que todos los minutos sean de libertad, de felicidad, de amor, de vida*
*Una frase que expresa la voluntad de vivir y el derecho de la mujer a ser libre y feliz, a vivir sin miedo, de la Campaña “Ni Una Menos”


Desde entonces se escucharon frases aberrantes y hasta campañas a favor de Darthés (a quien la Asociación Argentina de Actores le suspendió su afiliación) del siguiente tenor: por qué se esperó tanto para hacer la denuncia, qué hacía una nena de 16 años sola en otro país, por qué vestía un shortcito, sin dejar de mencionar a los periodistas varones que durante la conferencia de prensa querían que Fardin les diera detalles morbosos. No importaba si ella había sufrido, sufre o qué la animó a hacer la denuncia. Los varones querían saber dónde Darthés puso sus manos. Días más tarde el actor, dada su doble nacionalidad, se fugó a Brasil desde el aeropuerto Islas Malvinas de Rosario. Se sacó algunas fotos con sus fans y buscó nuevos rumbos, al parecer iba a trabajar en el restaurante de un primo. Se lo vio muy feliz y ahora se espera su regreso; incluso, según palabras de su letrado defensor Fernando Burlando, con algunas propuestas para volver a trabajar en la tevé. Del caso Fardin surgió la frase “Mirá como nos ponemos”, en referencia al “Mirá cómo me ponés”, que Darthés pronunció de igual forma en cada una de las situaciones que vivió con sus denunciantes, con la intención de poner la culpa sobre la mujer, la que vistiendo de una manera determinada lo provoca, lo excita, lo lleva a abusar de ella. Claro que desde la vereda opuesta y ante el inminente estreno de la telenovela Campanas en la noche, que tiene a Calu Rivero como protagonista, se apeló a un apagón televisivo con la frase “Mirá cómo no te miramos”, que surgió de un grupo de espectadores que se había proclamado a favor de Darthés. Tras la denuncia colectiva realizada por Actrices Argentinas se supo que la Línea Nacional 144 registró un aumento del 240 por ciento en sus llamadas. En una sesión los senadores nacionales colocaron un cartel en sus bancas con la frase “Mirá cómo nos ponemos”, en una evidente muestra de solidaridad con esta causa, mientras que los diputados emitieron un comunicado de adhesión en el que señalaron que la erradicación de la violencia de género “requiere mucho más que leyes”.


Y hay más: varios clubes de fútbol hicieron publicaciones alusivas al hashtags #Mirácómonosponemos desde sus cuentas oficiales, como Tigre, Independiente, San Lorenzo, Gimnasia, Godoy Cruz, Vélez, Banfield, Lanús y el femenino de River. La misma AFA publicó #NoEsNo en su cuenta de Twitter. También hubo sanciones a personas acusadas de haber incurrido en diferentes tipos de violencia de género, entre ellas la exclusión momentánea del periodista Martín Ciccioli del programa de Mariana Fabianni por ser sospechoso de hostigar a una mujer; en ambos casos por las quejas del público. Y para graficar mejor a qué refiere el “Mirá cómo nos ponemos”, hubo un caso televisivo, casual, durante el verano. A mediados de febrero, la actriz Sol Pérez, en medio de un móvil en vivo para un programa de América, le pidió a un televidente en la playa que borre el video en el que le había filmado el culo mientras ella salía al aire. “Es que estás así, en malla”, fue algo que el hombre balbuceó a modo de defensa, delante de cámara.

 

Amurallar el propio sufrimiento es arriesgarte a que te devore desde el interior.
Frida Kahlo *
*Basada en experiencias propias, la legendaria artista mexicana sostenía que esconder y enterrar en lo más profundo el sufrimiento es algo que dificulta tomar la decisión de decir basta


Desde aquel 11 de diciembre surgieron muchas más denuncias de actrices y periodistas a otras figuras reconocidas de los mismos ambientes. Pero ¿por qué no se denunció antes? Porque no se pudo. Hoy en día siguen las denuncias de mujeres abusadas o violadas que en su infancia o adolescencia fueron tratadas de mentirosas hasta por su propia madre. Porque hoy todavía se juzga al acusador o violador de acuerdo a la vestimenta de la denunciante. Porque los varones con un mínimo grado de poder, de autoridad en el ámbito laboral, piensan que tienen derecho a usar el cuerpo del otro. El “mirá cómo me ponés” de Darthés o del señor en la playa no se deberían escuchar nunca más. El Ministerio Público Fiscal, la Procuración General de la Nación y el Cuerpo de Peritos Forenses indicaron que en Argentina el 75 por ciento de los abusos sexuales y adolescentes tienen como victimarios a personas cercanas a la víctima. Casi el 60 por ciento provienen del padre o el padrastro y el 90 por ciento de las víctimas son niñas y adolescentes mujeres. Por cada mil casos de abuso sexual infantil y adolescente se denuncian 100 y sólo uno recibe condena, en un sistema judicial integrado mayoritariamente por varones. ¿Y aún se pregunta la gente por qué no se denunció antes?


COOPERATIVA DE TRABAJO LA CIGARRA LIMITADA