PACTO DE SILENCIO
El ominoso caso Perassi
Por Carina Ortiz @Ortiz_OrtizCar
EL CIUDADANO

Después de siete años y medio de investigación, el próximo 21 de marzo arranca en el Centro de Justicia Penal el juicio por la desaparición y muerte de Paula Perassi. La víctima, de 34 años, y madre de dos hijos fue vista por última vez en septiembre de 2011 y desde entonces la causa judicial tuvo varias carátulas que se fueron modificando a fuerza de empuje y determinación, especialmente la de sus padres Alicia y Alberto, quienes se presentaron como querellantes en la investigación en representación de sus nietos. Durante un año sólo hubo una pesquisa por averiguación de paradero.


Luego el principal sospechoso, un empresario que mantuvo una relación amorosa con Paula, y su ex chofer terminaron vinculados al caso y acusados de homicidio simple pero fueron liberados por falta de pruebas hasta que la teoría acusatoria se volvió más firme. La carátula cambió a privación ilegítima de la libertad, aborto no consentido seguido de muerte y nueve personas quedaron involucradas en la causa, cinco de ellos policías. El grupo se sentará en el banquillo con distintas imputaciones. La más grave es la privación ilegítima de la libertad y el aborto no consentido seguido de muerte, que conlleva una pena de prisión perpetua y para los policías la acusación es por encubrimiento agravado, entre otros delitos.





Gabriel Strumia explotaba una empresa de camiones; casado con Roxana Milch, ambos llegan presos al debate. La relación entre Strumia y Paula era clandestina, sólo algunos allegados conocían el vínculo. Paula descubrió que estaba embarazada y fue el principio del fin. Cuando se lo contó a su amante, el hombre intentó convencer a la sanlorencina para que abortara pero ella no aceptó. El 18 de septiembre un llamado telefónico la sacó de su casa; Paula avisó que iba a buscar la tarea de uno de sus hijos y nunca más regresó.


Su familia denunció el hecho y se inició una búsqueda de paradero donde hubo algunas evidencias que despistaron hacia una supuesta ausencia voluntaria de Paula, teoría que sus padres siempre rechazaron. Paula no dejaría a sus hijos. Esa carátula se mantuvo durante un año hasta que la hipótesis de que su amante estaba involucrado en el hecho tomó forma. El mozo de un bar de Timbúes contó que la tarde del 18 de septiembre de 2011 vio a Paula conversando con dos hombres; luego reconoció a Strumia como uno de ellos, el otro era su ex chofer Antonio Díaz. Ambos fueron imputados por homicidio simple pero con el tiempo lograron un sobreseimiento por este delito.


En 2015 los fiscales Román Moscetta y Donato Trotta presentaron una nueva teoría del caso, que también apoya la querella a cargo de los abogados José Ferrara y Adrián Ruiz. La acusación afirma que Paula salió de su casa engañada. En esas circunstancias la privaron de su libertad, la llevaron obligada a practicarse un aborto y murió durante la práctica. Su cuerpo nunca apareció, aún hoy sus padres claman por los huesos de su hija. Se han hecho excavaciones en Puerto General San Martín –por el Equipo Argentino de Antropología Forense– pero no se lograron resultados, el pacto de silencio sobre la suerte del cuerpo de la mujer sigue intacto.

La violencia es una constante en la vida de la mujer bajo el capitalismo. Cuando decimos que se va a poner fin a la violencia, decimos que se va a poner fin a todo el sistema.
Silvia Federici*

Tanto la Fiscalía como la querella apuntaron contra Gabriel Strumia, también contra su esposa Roxana Milch, a quien achacan una participación en el aborto no consentido seguido de muerte. En la causa se determinó que aseguró haber visto a Paula después de su desaparición junto a su hijo, algo que para la parte acusadora no se trató de otra cosa que un intento de plantar pistas falsas. También contra el chofer Antonio Díaz, a quien se lo vio junto a la víctima la tarde de la desaparición, y contra Mirta Rusñisky señalada como la persona que hizo el aborto a Paula. Todos ellos llegarán a juicio por el delito de privación ilegítima de la libertad y aborto sin consentimiento seguido de muerte, que tiene una pena en expectativa de prisión perpetua.


El comisario

Otro de los involucrados es el comisario Adolfo Daniel Puyol, ex jefe de la Agrupación Cuerpos, a quien se le achacó un estrecho vínculo con Strumia, ya que hubo comunicaciones telefónicas entre ellos con posterioridad a la desaparición de Paula. Para la querella es el nexo entre Strumia y la fuerza policial lo que ayudó a encubrir y perder pruebas. Presumen que brindó la logística para hacer desaparecer el cuerpo de Paula. La Fiscalía acusó a este uniformado por encubrimiento agravado pero la querella fue más allá y pidió su imputación por privación ilegítima de la libertad y aborto sin consentimiento seguido de muerte. Esta es la única diferencia en las acusaciones que presentaron ambas partes.

 

Encubrimiento

Los otros acusados son policías y todos participaron en la investigación por la desaparición de Paula. Se trata de Jorge Kretz, María Galtelli, Aldo Gómez y Gabriel Godoy. Llegarán a juicio acusados de encubrimiento agravado por su condición de uniformados y omisión de los deberes de funcionario público, sustracción y destrucción de pruebas y falsedad ideológica de instrumento público.

 

El juicio

Tras la fijación de una fecha límite para iniciar el juicio oral y público por parte del camarista Carlos Carbone en octubre de 2018, en marzo de este año la Oficina de Gestión Judicial de San Lorenzo dispuso el inicio del debate oral y público para el próximo 21 de este mes. El debate se realizará en el Centro de Justicia Penal de Rosario por cuestiones de organización, espacio y seguridad. El debate estará presidido por los jueces Mariel Minetti, Griselda Strólogo y Álvaro Campos. Se estima que el juicio llevará al menos tres meses de audiencias.

 

La violencia contra la mujer en todas sus formas es una violación de los Derechos Humanos.
Michelle Bachelet *
*Política chilena que ostentó la presidencia de su país en dos periodos: entre 2006 y 2010 y entre 2014 y 2018


COOPERATIVA DE TRABAJO LA CIGARRA LIMITADA