“Luego de tres años intentando por todos los medios conseguir justicia en sede judicial, a esta instancia se llegó gracias a la cooperación internacional entre los Ministerios Públicos fiscales de Nicaragua, Brasil y Argentina que escucharon mi palabra, produjeron prueba y consideraron que era mérito suficiente para acusar a este hombre de violación agravada”, escribió Thelma Fardin en un fuerte descargo que hizo en Instagram en las últimas horas luego de que Juan Darthés rompiera el silencio en un programa de la tevé brasileña a través de un audio que le envió al conductor, donde aseguró ser inocente.
En el referido audio en el que respondió una sola pregunta al periodista Roberto Cabrini, del programa Domingo Espetacular, el actor aseguró: “Finalmente me voy a poder defender. No hice nada de lo que me acusan. Soy inocente”. Sus dichos llegaron poco antes de que se revelará que el juicio en su contra se iniciará en Brasil el 30 de noviembre, en los tribunales federales de San Pablo, ciudad en la que está viviendo el acusado algunos días de la semana (el tiempo restante lo pasa en un exclusivo barrio residencial de Río de Janeiro), según confirmó el defensor del actor, Luiz Antonio Nazareth, en diálogo con la agencia de noticias Télam.
Cabe recordar que ante la denuncia de Fardin radicada en Nicaragua, donde ocurrió el hecho, Darthés se radicó en Brasil ya que ese país no tiene tratado de extradición con Nicaragua. En un primer momento, el acusado dijo que viajaría a declarar, pero siguiendo el asesoramiento de los profesionales que lo acompañan decidió no hacerlo expresando que si llegaba a ese país corría riesgo su vida.
La justicia nicaragüense incluso había ordenado su detención y captura internacional por violación agravada, sumado a un pedido de extradición. Interpol, por su parte, había emitido una cédula roja en 2019. Ahora el proceso se desarrollará en el lugar de residencia del actor.
En su comunicado, Fardin remarcó también cuál debería ser el debate actual y pidió que se deje de revictimizar a las mujeres que sufren la violencia machista. “El debate social ya no puede estar enmarcado en la discusión estéril de «le creo o no le creo», no es una cuestión de fe. El debate debe ser cómo terminamos con la impunidad en los casos de violencia sexual, cómo logramos que las pruebas sean eficientes y qué lugar le damos a la palabra de la víctima, frenando la revictimización y dejando de estigmatizarla”, escribió. Y cerró su mensaje agradeciendo la incansable lucha de los colectivos de mujeres que aún hoy por hoy la acompañan, desde la recordada denuncia de fines de 2018 donde, en una conferencia de prensa, el tema tomó estado público.