La denuncia realizada por un enfermero sobre el funcionamiento, a principios de año, de un Vacunatorio VIP en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria sigue dejando tela para cortar. Este viernes desde Siprus –el sindicato de los profesionales universitarios de la salud– pidieron investigar “la cadena de responsabilidades”, mientras que el secretario general de Luz y Fuerza, Alberto Botto, reconoció que fue vacunado, aunque aclaró que se debió a que es “personal estratégico” por formar parte de la EPE.
La secretaria general de Siprus Santa Fe, María Fernanda Boriotti, señaló que la denuncia sobre el Vacunatorio VIP repercutió en los trabajadores de la salud provincial: “Crea una sensación de abuso, de influencias políticas para quienes tienen algún tipo de poder, deben investigar la cadena de responsabilidades”.
“La denuncia por un vacunatorio de privilegio en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria durante los meses de enero, febrero y marzo genera la sensación de abuso, de estar por arriba de los demás, del uso de influencias políticas para los que tienen algún tipo de poder. Es una cadena de responsabilidades, es un círculo que debería erradicarse de la campaña de vacunación, también pasó a nivel nacional con personas que no realizan trabajos esenciales ni están entre las prioritarias”, sostuvo Boriotti en diálogo con LT8.
La titular de Siprus señaló que “es lamentable que en un marco como el de la pandemia, con el agotamiento extremo de los trabajadores de la salud, con la luz que implicó acceder a las vacunas como una esperanza de vida, se haga uso y abuso de las influencias. En ese momento, en los meses de enero y febrero, el personal de salud no había accedido en su totalidad a las vacunas, y existió este hecho lamentable de vacunaciones de privilegio”.
Por su parte, el secretario general de Luz y Fuerza Alberto Botto confirmó que fue inoculado en el Galpón 17 por ser el responsable legal de la obra social del sindicato: “No me siento un vacunado VIP. No le sacamos la vacuna a nadie”.
Botto admitió haber sido inoculado contra el coronavirus en enero de este año, pero descartó que haya sido un hecho fuera de la ley: “Quiero aclarar que no fue como esencial, sino que como personal estratégico. Soy el representante legal del sindicato, nosotros tenemos una mutual, los que nos encargamos de la salud somos nosotros, tenemos un vacunatorio”, señaló el dirigente gremial en declaraciones a Radio 2.
Según Botto, a principios de año gestionaron ante el Ministerio de Salud de la provincia la posibilidad de ser inoculados: “La vacuna era muy controversial y se hizo la gestión para vacunar a todo el personal expuesto, tal cual lo aconsejaba la Organización Mundial de la Salud. Hemos gestionado, hemos estado en terreno, no es que nos quedamos en nuestras casas. Hemos ido a lugares donde hay Covid, hemos recibido a pacientes que venían del interior a internarse en Rosario. No le sacamos la vacuna a nadie, era un momento en el que a nosotros se nos da la posibilidad de vacunarnos y la aceptamos”.
El dirigente sindical opinó además: “Personalmente no creo que exista la vacunación VIP, yo lo hice públicamente y no me siento un vacunado VIP. En su momento no hicimos un comentario de esta situación, creo que no correspondía tampoco, estábamos gestionando vacunas para todos, lamentablemente no se ha podido lograr”.
Por la denuncia del Vacunatorio VIP, este jueves renunció Alberto Joaquín a su cargo como vicepresidente de la EPE, después de haber admitido que recibió las dos dosis de la vacuna en el verano. Además, la Cámara de Diputados convocó al ministro de Gobierno de la provincia, Roberto Sukerman, a una interpelación que se realizará el lunes en la Legislatura.
