El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, reiteró estar «muy enojado» por los resultados de las investigaciones en el caso de la familia Pomar, a la vez que no descartó la salida de uno de los funcionarios que trabajó en el caso, Paul Starc.
«Estoy muy enojado con esa situación. Y de hecho pedí la cabeza de los responsables. Cuando busco resultados y no están, tiene que haber motivos correspondientes, y acá no están. Es serio que no se haya actuado con más eficiencia en el rastrillaje en la zona donde fue circulando el auto», cuestionó.
«Evidentemente hubo negligencia, descuido, no se cumplió con eficiencia con lo que yo esperaba, con un rastrillaje profundo y minucioso», advirtió el enojado gobernador.
«Cuando realizo los cambios los habló primero con los responsables y después los hago públicos». De esta forma dejo la posibilidad del alejamiento de Starc.
“Hasta ahora, hice estos cambios (en el gabinete) y no descarto otros», en referencia a las salidas de Claudio Zin (Salud) y de su hermano José Scioli (secretario de la Gobernación)».
«Voy a hacer los cambios que tenga que hacer. Puede ser en las personas o en las formas de organizar los ministerios», agregó.
El martes último, la familia Pomar, sobre la cual se habían tejido varias versiones, fue encontrada sin vida a unos 20 metros de una ruta cercana a Pergamino, al accidentarse el automóvil en el que viajaban, por lo que fallaron los rastrillajes policiales durante 24 días.