La demanda legal se decidió luego de que la página web de contenido sexual Pornhub lanzara la campaña «Classic nudes», una «guía interactiva» sobre cuadros con desnudos presentes en los museos más importantes del mundo.
«Puede que el porno no se considere arte, pero algunas obras de arte definitivamente lo son», dice la iniciativa del portal, propiedad de la compañía luxemburguesa MindGeek Holding, que recogió pinturas emblemáticas de los grandes espacios de exhibición del mundo y tomó su lado sexual y erótico, sin solicitud previa.
Con esta campaña, PornHub invita a conocer 120 desnudos que aparecen en obras de arte clásicas de grandes museos, y junto a las pinturas se suman pequeños podcast, así como videos en los que intérpretes recrean dichas escenas con claro contenido erótico. A esto se le añade una aplicación para ver “las escenas más calientes de la historia”.
De acuerdo al requerimiento legal de la Galería de los Uffizi, el portal de internet no solicitó permiso para comercializar con la imagen, según fuentes de la institución pública, citadas por el diario La Vanguardia.
Entre los cuadros utilizados por la campaña está El nacimiento de Venus (1485) de Botticelli, obra cumbre del Renacimiento florentino y uno de los mayores tesoros de los Uffizi explicada por la ex actriz porno y ex política italiana Ilona Staller, conocida popularmente como Cicciolina.
Pero también se han usado otros cuadros de los Uffizi como La Venus de Urbino (1534) de Tiziano, o Las tres gracias de Rubens.
El museo considera que el procedimiento correcto habría sido pedir la autorización a la institución o al Museo de Cultura italiano, presentar el proyecto a la dirección de la pinacoteca y, en caso de que fuera aceptado, pagar un impuesto por el uso de la imagen del cuadro.
Este caso es similar a la polémica surgida en mayo pasado sobre el uso de la imagen de las obras de arte por parte de los llamados influencer de internet.
Italia cuenta con una ley de 1993, actualizada en 2004 y 2014 en el Código de los Bienes Culturales, que permite el uso libre de la imagen de los cuadros si se hace a título privado o con fines científicos, educativos o informativos, señaló el representante legal del Uffizi. Y es por eso que su uso con finalidades comerciales debe ser solicitado, aceptado y pagado.
La campaña de Pornhub incluye obras de otros museos como el del Prado de Madrid, con La maja desnuda (1797) de Francisco de Goya, así como de la National Gallery de Londres o el Louvre parisino.
Varios de estos museos se manifestaron en contra de la campaña y rechazaron cualquier tipo de colaboración. “El Museo del Prado no ha participado en esta iniciativa”, informó ese espacio madrileño a través de sus redes sociales.