Los restos de 11 de las 14 víctimas fatales del accidente ocurrido en proximidades de la localidad santafesina de Villa Ocampo fueron inhumados en el cementerio de Villa Guillermina, en medio de muestras de dolor de familiares, amigos y vecinos. En tanto, fuentes policiales y judiciales indicaron que el chofer del camión que aparentemente provocó el accidente, de 18 años, permanece internado en el hospital de Villa Ocampo bajo custodia policial, a la espera de que sea dado de alta y pueda ser indagado por el juez correccional de Reconquista, Jorge Galbusera.
Centenares de vecinos de la pequeña localidad de Villa Guillermina, de sólo 7.000 habitantes, ubicada al norte del departamento General Obligado, participaron en la mañana de ayer del responso en la Capilla Sagrado Corazón de Jesús y caminaron las siete cuadras que los separaban del cementerio local.
Bajo un cielo gris, familiares y amigos acompañaron la caravana con los restos del chofer Aroldo Vázquez, de 63 años y los pasajeros Liliana Martínez de Brazzart, de 35; su hijo Nahuel Brazzart, de 4; Miriam Alfonso de Vieira, de 52 y su hija Yanina Vieira, de 19, que habían sido velados desde anteayer a la tarde en la capilla. Al pasar frente a una sala velatoria, se sumaron a la fila los cuerpos de Norma Saulina, de 54 años, y Eva Monzón de Núñez, de 58.
Uno de los momentos más emotivos se vivió cuando el cortejo pasó frente a la Escuela Primaria Nº 50, donde los alumnos formaron un cordón y aplaudieron al paso de los féretros.
Minutos después de la inhumación de estas siete personas, llegaron al cementerio local los cuerpos de Laura Catalina Gómez, de 31, y de su hijo Eric Santiago Duarte, de 9; como así también de Valeria Soledad Del Fabro, de 25 y de su hija Debrisa Lucía Canario, de 10; que habían sido velados en sus domicilios particulares.
Allí se replicaron nuevas escenas de dolor, ya que los cajones eran acompañados por decenas de chicos, compañeros de colegio de Eric y de Debrisa.
El intendente de Villa Guillermina, Eduardo Scarpín, quien en la mañana del lunes había declarado tres días de duelo por el accidente, acompañó a los familiares hasta el cementerio local, y todos los edificios públicos mostraron sus banderas a media asta.
Otros tres fallecidos miembros de una misma familia, Norberto Maidana, de 56; Alicia Romero de Maidana, de 49, y su hija Micaela Maidana, de 14, habían sido velados anteayer a la tarde y luego inhumados en el cementerio local.
Todas las víctimas eran integrantes del ballet folclórico “Retoños de mi pueblo” o familiares, y regresaban hacia Villa Guillermina tras participar de un encuentro de danzas en la localidad de Villa Ocampo, en una combi Renault Master de la comuna local.
El accidente se produjo a las 23.30 del domingo sobre el kilómetro 876 de la ruta nacional 11, cuando la combi chocó contra el acoplado cargado con cañas de azúcar de un camión conducido por Dante David Sosa, que se cruzó en el camino.
Como consecuencia del impacto, 14 personas murieron y otras 5 resultaron heridas de consideración: Aldana Flores, de 14 años; Sebastián Blanco, de 16; Agustina Brassart, de 8; Rocío Duarte, de 12, y Ariel Duarte, de 6. Los hermanitos Duarte son los que se encuentran más graves, aunque evolucionan, y ya perdieron en el accidente a su madre y un hermano, mientras que el resto tiene diferentes tipos de traumatismos (ver aparte).
Errores que cuestan vidas
“Con más de treinta años de médico, nunca antes había vivido algo parecido. Más allá de todo lo que se pueda decir, asegurar que fue dantesco, le queda chico”, afirmó ayer el ministro de Salud de Santa Fe, Miguel Ángel Cappiello.
“Los hombres cometemos errores muy importantes, y esos errores cuestan muchas vidas. Mas allá de lo que digamos de la educación vial, de que las rutas no están adecuadas, de que hay que hacer mejoras, hacer autovías, se pueden poner todos los calificativos que quieran, pero hubo hechos que no se justifican, irresponsables que causaron este accidente”, agregó.
Cappiello indicó que el equipo de Salud Mental de la provincia permanece en la localidad de Villa Guillermina brindando contención a las familias afectadas por la tragedia.
“Tenemos que apuntar a mejorar la cultura para estar en una ruta, para poder llevar adelante una situación que no genere este tipo de accidentes masivos, donde se ven cosas realmente desagradables y que perfectamente podrían haberse evitado”, sostuvo el ministro de Salud santafesino.
“La prioridad es permanecer acompañando a los familiares que han sufrido pérdidas tan dolorosas, lo cual representa un shock emocional difícil de superar para poder elaborar el duelo, al igual que para los chicos internados y a sus familias”, afirmó.
Nueva necropsia al chofer
El juez correccional Galbusera quiere determinar, mediante una nueva necropsia, si el conductor de la combi –Aroldo Vázquez– estaba en condiciones físicas para conducir el rodado que chocó contra el camión cañero. Fuentes de la pesquisa indicaron que una de las hipótesis que maneja la Justicia es que Vázquez podría haber sufrido una descompensación mientras manejaba, y que por ese motivo no pudo detener la marcha ni esquivar el camión Ford 7000 con el que impactó y produjo el fatal desenlace.
Aunque dicha versión y condice con los peritos policiales, que entregaron un informe en el cual se señala que no había rastros de frenada en el asfalto a la altura del kilómetro 876 de la ruta 11, donde ocurrió el siniestro.
Asimismo, el juez Galbusera le tomará declaración a Dante Sosa, el chofer del camión, de 18 años, apenas sea dado de alta. Además se investigan las condiciones mecánicas del camión Ford 7000 modelo 1979, cuyo propietario aparentemente no pagaba patente desde hacía siete años.
