El centro operativo nacional para la lucha contra el coronavirus indicó hoy que durante las últimas 24 horas se confirmaron 25.110 casos y 895 fallecidos, la cifra diaria de muertes más alta del país en la pandemia, en el marco de un repunte que llevó a Rusia a enlazar varios máximos durante la última semana.
La cifra de muertos supera el máximo anterior, detectado el domingo con 890 decesos y los 887 del viernes.
Asimismo, el país lleva cuatro días consecutivos por encima de los 25.000 casos, en medio de un repunte acusado durante las últimas dos semanas.
El Kremlin manifestó que la situación suscita preocupación, pero aún no considera un confinamiento en todo el país ni ninguna otra medida a nivel nacional.
Varias regiones rusas tienen asistencia limitada a eventos masivos y acceso restringido a algunos lugares públicos, como teatros, cines, restaurantes y bares, solo accesibles para aquellos que fueron vacunados, quienes están recientemente recuperados de Covid-19 o que dieron negativo en los últimos 72 horas.
Sin embargo, los críticos argumentan que estas medidas no son suficientes para frenar el aumento.
Las nuevas infecciones diarias en la capital rusa casi se cuadriplicaron durante el último mes, pasando de unas 1.100 a principios de septiembre a unas 4.000 esta semana.
Hoy Moscú volvió a figurar como la ciudad rusa con más positivos y decesos, con 3.827 y 72, respectivamente, informó la agencia rusa de noticias Sputnik.
Por detrás figura San Petersburgo, con 1.894 casos y 58 muertos.
En algunas áreas del país, incluidas estas dos grandes ciudades, la vida sigue en gran parte normal, con negocios que operan como de costumbre y una obligatoriedad de uso de barbijo que se aplica de manera poco estricta.
Mientras tanto, el vasto sistema de atención de la salud de Rusia comenzó a mostrar signos de estar abrumado por el brote.
Medios rusos informaron que cada vez se forman filas más largas de ambulancias frente a los hospitales en San Petersburgo, la segunda ciudad más grande del país.
En la ciudad de Vladimir, 180 kilómetros al este de Moscú, se vio un equipo de ambulancias conduciendo a un paciente con Covid-19 a un edificio del Gobierno local después de no poder encontrar una cama de hospital, informaron medios rusos.
El vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo hoy a periodistas que la «principal causa» del aumento de muertes fue «el nivel insuficiente de vacunación».
Peskov señaló que «el virus se está volviendo más maligno» y advirtió que, por lo general, los no vacunados son los que enferman gravemente o fallecen.
Hasta la semana pasada, el 33,5% de los 146 millones de habitantes de Rusia habían recibido al menos una dosis de la vacuna, y solo el 27,4% estaban completamente vacunados.
A pesar del aumento de las infecciones, los funcionarios de Moscú anunciaron ayer el cierre del mayor punto de vacunación de la capital rusa en Gostiny Dvor, un enorme espacio de exhibición, para poder realizar “eventos culturales”.
Por su parte, el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, comunicó ayer que las autoridades locales tienen previsto reanudar las loterías entre los ciudadanos vacunados.
Desde el inicio de la pandemia, Rusia acumula más de 7,6 millones de casos y 211.696 muertes causadas por la Covid-19.
Sin embargo, los informes del servicio estatal de estadísticas de Rusia, Rosstat, indican que el recuento de muertes relacionadas con el coronavirus revela de forma retroactiva cifras mucho más altas.