A falta de diez partidos para terminar el campeonato, Central se encuentra más cerca del último que del líder en la tabla de posiciones. El torneo del equipo del Kily González es irregular y viene de tres partidos sin ganar, tras la igualdad de Estudiantes en el final el último viernes. Y el ingreso a la próxima Copa Sudamericana se está tornado difícil, aunque matemáticamente tiene chances. Claro que para lograr acceder a jugar nuevamente el certamen internacional deberá comenzar a ganar y mantener una racha positiva sostenida en el tiempo. Para lograr este importante objetivo la expectativa está en que regresen los titulares que no han podido estar los últimos partidos.
¿Qué le queda en el camino? El viernes a las 16.45 recibirá a Patronato en el Gigante de Arroyito. Luego, el martes 19 a las 14.30, visitará a Platense; el sábado 23 a las 20.15 recibirá a Racing. Por la fecha 19 irá a Santa Fe para medirse contra Unión y en la 20 viajará a Florencio Varela para enfrentar a Defensa y Justicia. Luego será local de Atlético Tucumán, visitante de Colón, anfitrión ante River, visitará a Lanús y cerrará de local ante Huracán.
Más allá del largo derrotero que aún le queda en este torneo, la expectativa a corto plazo pasa por conocer si el equipo podrá volver al triunfo ante el conjunto entrerriano, ayudado por los regresos de los titulares que no pudieron estar en las últimas jornadas. Es que no hay dudas de que el Kily tiene un plantel corto a disposición y que sufre cada ausencia. Y ni hablar si padece, como en los últimos juegos, cuatro bajas importantes como Gastón Ávila, Diego Zabala, Emiliano Vecchio y Lucas Gamba, titulares indiscutidos cuya ausencia no hizo más que agravar el presente del equipo.
Si bien faltan muchos días para el juego ante el Patrón, el cuerpo técnico tiene la ilusión de poder contar con al menos tres de estos futbolistas para el viernes que viene. Y de esta manera volver a sumar de a tres para que el objetivo de la Sudamericana no se convierta rápidamente en algo utópico.
Tomar la decisión cuanto antes
Más allá de que aún quedan 30 puntos en juego, la comisión directiva tiene que comenzar a tomar decisiones y una de ellas no tiene lugar a demora. El contrato del entrenador y del director deportivo, Raúl Gordillo, tienen fecha de finalización el mismo día: 31 de diciembre.
En cuanto a la continuidad del Kily, la dirigencia parece no tener aún una decisión. Y considerando que todavía faltan 10 partidos para que termine el campeonato, parece hasta lógico que no se defina ahora. El único que se manifestó a favor de que el técnico continúe fue el presidente Rodolfo Di Pollina. La principal autoridad del club declaró, hace tres semanas, en el programa Sello de Fútbol que “la intención es que el proyecto continúe con el Kily”. El resto de los dirigentes por lo bajo opinan que quieren esperar un tiempo para tomar la decisión e incluso algunos hasta comentan que para alargar la estadía será un condicionante la clasificación a la Sudamericana 2022.
Lo que sí debería ser un tema de rápida resolución es la situación del director deportivo. La dirigencia debe definir sí o sí en el corto plazo si Gordillo seguirá o no en el club a partir del primer día de enero próximo. Esta decisión no puede seguir postergándose, ya que comenzar a trabajar de cara al mercado de pases es fundamental.
Si bien faltan tres meses para que el libro de pases se abra nuevamente, hay algunas certezas importantes de cara al plantel que disputará el año futbolístico que se viene. En defensa, a modo de dar sólo un ejemplo, hay varios contratos que se terminan como son los casos de Fernando Torrent, Nicolás Ferreyra y Gastón Ávila. El vínculo de los dos primeros tiene opción de compra y hay que resolver si el club hará uso o no de esa cláusula. Ya que cualquier decisión que se tome repercutirá en la cantidad de jugadores a incorporar en la última línea. En cuanto al Gato, si bien está previsto hablar con el consejo de fútbol de Boca, es casi un hecho de que el zaguero volverá al club de la Ribera. Ahí, en el sector defensivo ya hay mucho trabajo para realizar es por esto que la decisión de renovarle a Gordillo o buscar otro en su lugar no se puede seguir postergando.