Una marcha para repudiar la violencia que azota Rosario convocada por la Pastoral de Drogadependencia del Arzobispado tendrá lugar el próximo martes. La concentración será en la plaza López, de avenida Pellegrini y Buenos Aires, desde donde se realizará una caminata en silencio hasta el Monumento Nacional a la Bandera, en Santa Fe al 500. La movilización “por la paz” busca visibilizar los actos delictivos y hechos de sangre que a diario golpean a los rosarinos, pero también “interpelar” a los políticos en la búsqueda de soluciones.
“A veces la política toma las cosas cuando aparecen en la escena pública. Este tema exige que se supere la grieta”, dijo el sacerdote Fabián Belay en declaraciones periodísticas.
En ese sentido, el referente de la Pastoral de Drogadependencia consideró que “la sociedad no ve un proyecto que lleve a algo mejor” y mencionó que cuando los políticos “no atienden la agenda real, las cosas se van desmadrando”.
Entre los temas que consideró cruciales para cambiar la situación mencionó la necesidad de empezar a transformar la educación, la Justicia, la salud, la inclusión y la generación de puestos de trabajo. “Esos gestos más que ser una bandera de uno u otro, debería ser la bandera de la política en lo general”, enfatizó para reiterar que los dirigentes que tienen el poder de la representatividad deben “asumir los problemas del pueblo”.
También mencionó la necesidad implementar políticas de prevención de adicciones ya que muchos delitos están vinculados a ese flagelo.