La comisión directiva del Museo de la Memoria reclama al intendente Pablo Javkin que llame a concurso para designar un nuevo director o directora de la institución. El pedido se da luego de que la última directora, Viviana Nardoni, se jubilara esta semana. Su mandato se había terminado en diciembre de 2019 y continuó en gestión con la promesa de un nuevo llamado durante el 2020 pero hasta ahora no ocurrió.
En este sentido, la integrante de la comisión directiva Viviana Della Siega expresó a El Ciudadano que desde el inicio de esta gestión intentan reunirse con el intendente para resolver esta situación. «Le hemos mandado tres notas, no nos contestó ninguna, nunca nos citó. Por eso ya pensamos que ahora que Viviana formalmente se jubiló hay una acefalía porque el cargo de director o directora del museo se cubre por concurso. Eso está establecido claramente por ordenanza, se tiene que cumplir así y no entendemos por qué durante estos dos años prácticamente que han pasado no se llamó a concurso porque incluso s entendemos que hasta se podría haber hecho en forma virtual», repasó.
Además, Della Siega sostuvo que desde la comisión han tenido paciencia pero que en este momento les pareció importante hacer pública la situación. «Lo que no hemos tenido además es ni siquiera un signo de habernos escuchado, de haber leído nuestra nota, de tener el más mínimo interés de reunirse con nosotros».
El Museo de la Memoria fue creado en 1998 y funciona desde diciembre de 2010 en su sede definitiva, en la esquina de Moreno y Córdoba. Ese edificio fue ocupado durante 25 años por el Comando del II Cuerpo de Ejército Argentino, que cumplió un rol fundamental en el diseño de la represión durante los años de terrorismo de Estado entre 1976 y 1983. En colaboración con la policía provincial y diferentes estamentos de la sociedad civil rosarina, diseñó y llevó a cabo el plan de persecución y exterminio que se desplegó sobre seis provincias argentinas.
Sobre la importancia de solucionar esta situación Della Siega manifestó: «Entendemos, primeramente, que tiene que cumplirse con la normativa vigente. Hay un concurso donde hay un jurado, donde están representados incluso los organismos de derechos humanos, el Concejo municipal». También señaló que les preocupa las cuestiones administrativas del museo, ya que muchas veces se requiere de la firma de quien dirige la institución y eso puede impedir el normal funcionamiento.
En cuanto al funcionamiento de la comisión directiva, contó que existe desde el armado del museo en Rosario y que su función no es cogobernar sino «colaborar con la gestión, ayudar a cumplir con los objetivos del museo»
«Nosotros desde esta comisión directiva que se conformó ya hace varios años, cuando se renovó, lo que hicimos en primer lugar fue un reglamento interno de funcionamiento y además hemos hecho una propuesta para definir claramente las funciones, que se las hemos presentado también antes de la pandemia a la comisión de derechos humanos del Concejo de la cual también estamos esperando que nos contesten si acuerdan o no. Hemos tenido reuniones no hace demasiado tiempo vía zoom con la comisión de derechos humanos del Concejo municipal y en principio estaban de acuerdo pero también estamos esperando que aprueben esa modificación», contó.