La agente de la policía del Chubut, Sofía Herrera, fue condenada a 1 año y 9 meses de prisión en suspenso y a 3 años y 3 meses de inhabilitación especial para ejercer la función, al ser encontrada culpable de la figura de «vejaciones» contra dos vecinas de Puerto Madryn que fueron obligadas a desnudarse y hacer sentadillas en el baño.
«Los hechos que llegaron a juicio datan de marzo del 2020, durante el aislamiento obligatorio por la pandemia que prohibía a la gente circular por las calles», recordó en diálogo con Télam la fiscal Mabel Covi, que llevó adelante la acusación.
Los casos fueron dos: el de una empleada del rubro gastronómico y el de una trabajadora del sistema de salud que fueron llevadas a la comisaría por «no respetar el aislamiento», aunque ambas estaban realizando un servicio permitido pero no contaban con la debida autorización al momento de la detención.
«Fueron llevadas a la comisaría tercera de Puerto Madryn donde la agente Herrera las llevó al baño, las obligó a desnudarse, a mirar la pared y a realizar una sesión de sentadillas», detalló Covi.
Luego del maltrato, las mujeres fueron llevadas a un calabozo, donde se conocieron y compartieron la experiencia que habían vivido, lo que derivó luego en la denuncia pertinente por el «trato prepotente y humillante» que recibieron.
«Lo llamativo es que una de las víctimas iba con su marido, que también fue llevado a la comisaría, pero al hombre simplemente lo notificaron de lo actuado, los retuvieron por unas horas mientras se hacían las actuaciones y no lo obligaron a hacer nada de lo que la agente de policía hizo con las mujeres», detalló la fiscal.
El fallo que dictó este martes el juez Marcelo Orlando es «muy importante», consideró la integrante del ministerio público fiscal porque «da por tierra el argumento de la policía que dijo que ella pensó que lo que hizo estaba permitido como correctivo para que la gente cumpla con el aislamiento».
Se trata de una agente joven, que había ingresado en el 2018 a la fuerza policial.