La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), dependiente del Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Aníbal Fernández, desbarató una organización criminal dedicada a la distribución y comercialización de estupefacientes al menudeo. Tras 10 allanamientos en distintos domicilios de Rosario, los oficiales de la fuerza que conduce José Glinski, detuvieron a nueve personas y secuestraron dosis de cocaína, marihuana, balanzas, armas de fuego, un chaleco antibalas, dinero en efectivo y motos, entre otros elementos.
En el transcurso de la investigación, que comenzó hace 11 meses a raíz de una denuncia anónima, se comprobó la existencia de un clan familiar liderado por una mujer que, junto a su pareja y al hijo de éste, abastecía puntos de venta de droga en las inmediaciones de los barrios Rucci, La Cerámica y Zona Cero, al noroeste de la ciudad. Para ello empleaba una red de colaboradores, quienes también fueron identificados.
Ampliando las tareas de inteligencia criminal, los investigadores precisaron que debido a disputas territoriales que incluyeron balaceras ocurridas en cercanías de la calle Blomberg, la banda mudó su centro de operaciones a la zona sur de Rosario, y en una finca próxima a la avenida Avellaneda que almacenaba la droga. Asimismo, abrió un kiosco – almacén en el barrio Matheu. Pese a la nueva actividad comercial legal, siguió controlando los puntos de venta en zona norte.
El director nacional de la PSA, Glinski, sostuvo que “se trata de una típica red criminal compuesta por familiares, dedicada al estiramiento, adulteración y fraccionamiento de drogas para la venta a pequeña escala, que se da en zonas de marginalidad urbana”. Asimismo destacó que “la presencia de armas de fuego y chaleco antibalas demuestra el nivel de violencia que hay en estos mercados ilegales porque hay una segmentación de la oferta y una competencia cuya regulación se da de manera violenta, una de las particularidades que tiene Rosario”.
Como resultado de los procedimientos, los oficiales detuvieron a tres mujeres y seis varones -todos de nacionalidad argentina-, e incautaron 21 gramos de clorhidrato de cocaína fraccionados en 40 dosis; 677 gramos de marihuana repartidos en 203 dosis y dos bultos; semillas de cannabis; dos balanzas de precisión; elementos de corte; un chaleco balístico; tres pistolas; un revólver; cuatro cargadores y 68 municiones de distinto calibre. También secuestraron 118.000 pesos; dos motos; 18 teléfonos celulares; 13 chips telefónicos; una notebook; un pendrive y documentación de interés para la causa.
Intervinieron el Juzgado Federal Nº 4 de Rosario, a cargo de Marcelo Bailaque; y la Fiscalía Federal Nº 3, a cargo de Adriana Saccone.