Rosario es sinónimo de fútbol. Siempre fue así. Cuna de un sinfín de futbolistas que hicieron historia, hay una que merecía ser contada por su propia gente. La de un padre y su hijo que recorrieron el mismo camino dentro del deporte más popular y pasional de todos. “Los De la Mata. Pasión por el fútbol”, es el libro que cuenta la vida de Vicente y Vicentito, referentes de nuestra ciudad y del país, nacidos en el corazón del barrio República de la Sexta.
“Nunca antes en AFA se había registrado que un padre y después su hijo jueguen en un mismo club, Independiente: 14 temporadas Capote padre y 10 su hijo. Y encima después ambos también vistieron la camiseta de la selección nacional”, le cuenta a El Hincha Alicia Fernández, “la primera periodista deportiva de la ciudad de Rosario”, como ella misma se presenta, egresada de la UNR y con “cincuenta y tantos años de trayectoria”.
Alicia nació y se creció en la misma cuadra que los De la Mata y hasta fue compañera de escuela de Vicente hijo. Y con la ayuda de un experto en la historia de Central Córdoba como Julio Rodríguez (NdR: autor de “Gabino Sosa. El payador de la redonda), tras varios años de investigación y esfuerzo lograron terminar el libro, todo un homenaje a la memoria de Capote padre, considerado uno de los mejores jugadores en la historia del fútbol argentino.
Vicente de la Mata nació en Rosario el 15 de enero de 1918 y dio sus primeros pasos en el Charrúa y con apenas 19 años fue convocado a la selección para jugar el Sudamericano de 1937, en el cual Argentina le ganó la final a Brasil con dos goles del rosarino. Ante Perú, en lo que fue su debut, Antonio Sastre, ya un jugador consagrado, le dijo: “Acercate a mí, que entre los dos vamos a hacer capote”. Así surgió su apodo. Durante ese torneo, en pleno verano, fue transferido a Independiente, lo que significó uno de los pases más importantes de la época.
Fue en el Rojo donde Capote se convirtió en leyenda, conquistando varios títulos y erigiéndose como uno de los futbolistas más recordados en la rica historia del club de Avellaneda. Sobre el final de su carrera regresó a Rosario para jugar en Newell’s y finalizar donde todo empezó: Central Córdoba, donde más tarde fue DT, dirigente, y hasta concesionario del buffet. En total levantó tres títulos con Independiente (1938, 1939 y 1948), y tres con la selección, los sudamericanos 1937, 1945 y 1946.
Pero si hijo Vicentito nunca jugó en el Matador de barrio Tablada. A solo 14 años comenzó a jugar en el Rojo y se quedó casi una década, integrando el equipo campeón de la Copa Libertadores de 1965. Luego fue transferido al fútbol mexicano, en el que vistió las camisetas de Necaxa y Veracruz. Además, tuvo un paso por la selección argentina, en la que disputó seis partidos, el último ante Italia, en Turín. Una serie de lesiones lo marginaron del Mundial 1966, quedándose afuera a último momento. Al volver al país, luego de su paso por O’Higgins de Chile, jugó en Argentino de Quilmes, club en el que se retiró.
“El libro es un proyecto bien rosarino y se hizo con dinero de nuestro propio bolsillo. Hasta la editorial es de acá. Es un orgullo haber trabajado con todos ellos”, expresó Fernández, quien enseguida completó: “Vicente me dijo que no quería que esto sea algo lucrativo, que lo que le importaba se conozca la historia de su papá. Tiene devoción por él. Es más, no quería estar en este trabajo, pero lo que hacía distinto al libro es su presencia. Por suerte pude convencerlo”.
Presentado originalmente en noviembre de 2019, “Los De la Mata. Pasión por el fútbol” se podrá conseguir a partir de ahora en su edición de tapa a color, en la cual se destaca el Rojo que tanto significó para la familia. “El sueño de Vicente hijo era ver a su padre con la camiseta de Independiente a todo color y por suerte pudimos cumplirlo”, reveló Alicia, quien estará presentando el libro el próximo lunes 25 a partir de las 18 en la Alianza Francesa (San Luis 846).
