Gabriel Sanabria, un agente de la Policía Motorizada de 26 años, recibió en la madrugada de este viernes alrededor de 10 disparos cuando intentaba identificar a los cinco ocupantes de un auto en barrio Saladillo de la zona sur, por lo que permanece internado en grave estado en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Sus compañeros consiguieron dar poco después con el vehículo involucrado, que tiene pedido de captura por robo, y detener a cinco sospechosos del ataque en las inmediaciones de Hungría y Batlle y Ordóñez, en barrio Molino Blanco. La sorpresa fue la cantidad y calidad de las armas que tenían los atacantes en una mochila que fue descartada: pistolas y ametralladoras, incluso con silenciador.
El agente fue herido a las 2.20 en Arijón al 400 cuando con un colega detuvieron la marcha de un automovilista que iba en un Peugeot 206 color gris junto a cuatro acompañantes, ya que advirtieron una actitud sospechosa. Sanabria se acercó a la ventanilla del conductor y, según indicó el ministro de Seguridad Jorge Lagna a la prensa, sin mediar palabras desde el interior dispararon una ráfaga de entre 10 y 15 disparos mientras el automovilista aceleraba.
“El problema no fue el chaleco sino que fue la posición de tiro. Cuando él se acerca al auto, le tiran casi en movimiento y su costado queda desprotegido. Es una acción cobarde, demencial y que merece que se pudran en la cárcel”, sostuvo Lagna en declaraciones al programa radial De Boca en Boca de Radio 2.
El policía, oriundo de San Javier, tenía chaleco antibalas pero la mecánica del ataque hizo que quedara tendido con heridas de arma de fuego en muslo y mano derecha y en ambos costados del tórax. A la par de pedir la presencia de un sistema médico de emergencias Sies, sus colegas dieron el alerta e hicieron un operativo cerrojo para dar con los atacantes.
Tras algunas comunicaciones, el personal de la Policía de Acción Táctica que patrullaba la inmediaciones de la zona sur informaron que un rodado de las mismas características estaba detenido, sin ocupantes y con las puertas abiertas, un kilómetro más al sur del lugar del hecho, en Hungría al 100 casi esquina con Ayacucho de barrio Molino Blanco.
Tras requisar el vehículo y pedir datos del mismo, se comprobó que tenía pedido de secuestro por denuncia de su robo fechada el 24 de abril en calle Centenario y Andes, del Parque Regional Sur.
Tras la búsqueda de los ocupantes del Peugeot, los uniformados consiguieron dar con los cinco sospechosos a unas cuatro cuadras de donde hallaron el auto, a las 3.40 –de acuerdo con las comunicaciones de las fuerzas federales y provinciales– en la zona del asentamiento precario de Hungría y Batlle y Ordóñez.
Adolescentes con ametralladora: detuvieron a 5 sospechosos por los disparos al policía
El policía herido en el intento de identificación vehicular fue trasladado primero al cercano Hospital Roque Sáenz Peña, pero debido a la gravedad de su estado lo derivaron desde allí al Heca, donde permanece internado.
El brutal ataque es investigado por la fiscal Gisela Paolicelli, quien ordenó medidas al personal del Gabinete Criminalístico y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
Investigan si el ataque al suboficial está relacionado a la caída de un hombre vinculado a Los Monos