Un numeroso grupo de vecinos de la vecina ciudad de Granadero Baigorria, junto a sectores ambientalistas y otras fuerzas vivas de la misma localidad, inició en estos días una serie de acciones tendientes a impedir el emplazamiento de una sede del Banco Nación en una parte del espacio público llamado Parque San Martín –situado a la altura del barrio Jardín de Los Pinos–, que fue donado por el municipio local a la entidad financiera en 2014, hecho que los mismos vecinos señalan como cuestionable al tratarse de una institución sobradamente capaz de adquirir un terreno en cualquier parte «comprándolo» sin necesitar de «cesión» alguna.
Los vecinos reconocen la importancia de contar con una sede del Banco Nación, pero objetan la pérdida de parte de un parque público de significativo valor paisajístico y ambiental y piden que se disponga la relocalización en otro sitio de la ciudad. En la actualidad ya se iniciaron los trabajos de adaptación del terreno para la construcción en el predio: se extrajo la capa de suelo vegetal; se talaron tres árboles añosos de gran porte; se rellenó el terreno con tierra colorada, y se cercó el terreno con tejido de alambre. Al mismo tiempo, se exhibe cartel de obra del Banco Nación adherido al tejido perimetral.
Las objeciones planteadas por los vecinos son de carácter ambiental y urbanístico, amén de otras conexas. Entre ellas se encuentra la pérdida de espacio verde público en un contexto de disminución de esas áreas consignadas en el documento oficial denominado “Plan Estratégico Territorial Granadero Baigorria 2018”, donde se especifica que en 2010 la cantidad de espacio verde era de 17,96 m2 por habitante, y en 2018, con una población estimada en 55 mil residentes, este índice se redujo a 12,19 m2 por habitante, lo cual es claramente regresivo desde el punto de vista ambiental.
A lo que habría que agregar la pérdida de los servicios de amortiguamiento de ruidos y contaminación provenientes de la avenida San Martín (Ruta Nacional Nº 11), que tiene una permanente circulación de vehículos, incluidos rodados de cargas, y los ruidos, consumos de energía y emisiones de distinto tipo, incluyendo radiación electromagnética, provenientes de la propia actividad del banco.
Otra de las atendibles argumentaciones que plantean los vecinos es que los terrenos del Parque San Martín forman parte de un barrio, fueron cedidos para este fin, y conforman una unidad urbanística con las viviendas y los espacios comunes. También que la instalación de una entidad bancaria significará un importante aumento en el flujo de vehículos particulares, con la consiguiente demanda de espacios para estacionamiento que modificarán las dinámicas de uso de la vía pública y podrían comprometer otros sectores del parque (impermeabilización del suelo para construcción de playas de estacionamiento, o uso desorganizado de los espacios accesibles) y afectan directamente a una vivienda cuyo frente da al parque en cuestión, ya que una de sus medianeras bloquea y anula su frente al no existir entre ambas una calle, que en términos prácticos es como construir un edificio en la vereda.
Una buena cantidad de notas detallando cada una de las objeciones y solicitando la derogación de la ordenanza fueron presentadas al intendente Adrián Maglia y al Concejo Deliberante de Granadero Baigorria, así como también se solicitó la suspensión de la obra hasta que se coloque cartelería informativa y se instrumenten medidas de seguridad y se elevó escrito a la Secretaria de Salud y Ambiente local solicitando suspensión de la obra hasta que se proporcione a los vecinos documentación ambiental y se den oportunidades de participación vecinal, detallaron.
Se mantuvieron además conversaciones con algunos concejales y con funcionarios de primera línea del banco. Estos últimos manifestaron que la entidad está notificada del conflicto, y que dará inicio a acciones tendientes a su resolución sin que hasta el momento haya alguna señal en ese sentido.
Los vecinos vienen convocándose en asambleas junto a organizaciones ambientalistas de la zona desde el inicio de la obra en las que van decidiéndose los pasos a seguir tendientes a revertir la situación, entre ellos el de hacer público a través de medios y redes sociales un conflicto que afecta seriamente a la comunidad y para lo cual esperan una pronta respuesta de las autoridades municipales que hasta el momento no ocurrió, cerraron los vecinos su pedido.