La Cámara de Diputados podría entrar el próximo martes en una nueva etapa de su historia, si finalmente la bonaerense Cecilia Moreau es elegida presidenta y se convierte en la primera mujer de la Argentina en ocupar ese cargo.
Hasta el momento, la presidencia de la Cámara baja solo había quedado en manos de hombres, pero esta semana se espera que esa situación cambie y se inaugure otro capítulo.
Moreau reúne las condiciones necesarias para hacerse con el cargo, desplazando a los varones y colocándose primera en la lista para abrir el camino a las mujeres en un nuevo espacio de poder.
Su postulación es impulsada por el Frente Renovador de Sergio Massa. El designado «superministro» dejará la presidencia de Diputados, pero no quiere resignar el control de ese punto estratégico y Moreau es una dirigente de su extrema confianza.
Además, la bonaerense tiene una estrecha relación con el kirchnerismo, ya que supo tejer un excelente vínculo con Máximo Kirchner cuando hacía tándem con el líder de La Cámpora en la jefatura del bloque del Frente de Todos.
Esas afiliaciones la posicionan en lo más alto de la lista de posibles presidentes de la Cámara, un rol que por acuerdos parlamentarios no escritos siempre queda para el frente gobernante.
Tras confirmarse la salida de Massa y su asunción como ministro de Economía, Agricultura y Desarrollo Productivo, en Diputados también se habló del porteño Carlos Heller y de la fueguina Rosana Bertone como otros posibles candidatos, aunque el nombre de Moreau fue desde el principio el más fuerte para el cargo.
«Ella reúne todos los requisitos para poder presidir la Cámara en estos momentos tan difíciles», resaltó el presidente del bloque del Frente de Todos, Germán Martínez.
La Presidencia de la Cámara baja es un puesto de importancia, pero en el contexto de extrema paridad que experimenta el cuerpo por estos tiempos esa relevancia se transforma en clave para el Gobierno, ya que de la búsqueda de consensos depende la sanción de leyes.
Massa como «superministro» requerirá de normas legislativas que le permitan avanzar con políticas y medidas a largo plazo, por lo que el rol del jefe de la Cámara será de vital importancia. De allí el interés del massismo de tener en ese lugar a una dirigente cercana.
Moreau pondrá a prueba su cintura política para sacar adelante las propuestas legislativas del Poder Ejecutivo, en momentos en que Juntos por el Cambio endureció su postura y la posibilidad de negociación es cada vez más escasa.
Deberá echar mano también a su relación con los bloque más pequeños que no pertenecen al oficialismo y a JxC, que por estas horas son centrales para destrabar discusiones finas.
El próximo martes a las 14 se reunirá la Cámara baja para tratar la renuncia de Massa y elegir a su reemplazante, que ya se hará cargo del puesto inmediatamente.
En lugar del líder del Frente Renovador asumirá Juan Marino, líder del Partido Piquetero y actual funcionario del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad de Buenos Aires, que encabeza Andrés «Cuervo» Larroque.