En Guaymallén, Mendoza, todavía siguen asombrados por la aparición de pozos en los que sale humo hirviendo y en los cuales la tierra llega a alcanzar los 300°C. Este fenómeno ya generó enormes inconvenientes a los vecinos ya que muchos resultaron heridos al acercarse.
Por el momento ni las autoridades ni especialistas puedan explicar los motivos de dichas apariciones que ocurren, sobre todo, durante las noches. La primera hipótesis que se puso en cuestionamiento era sobre posibles incendios subterráneos, pero ya fue descartado por geólogos.
Otros indican que existe una probabilidad de que sea el fenómeno denominado «Turba» que son suelos carbonosos que se formaron como resultado de una descomposición libre de oxígeno de las plantas muertas y que al aumentar su temperatura permite que la «tierra arda».
Las guardias hospitalarias son los encargados de recibir a los heridos, que en su mayoría son menores de edad que al circular por el lugar sin calzado son quemados por las altas temperaturas.
El lugar donde están a la vista estos pozos es un baldío aledaño a viviendas y hay más de 75 familias que adquirieron un lote del terreno y por el momento no pueden realizar sus casas por el conflicto del suelo.
Un medio local explicó que este fenómeno comenzó a aparecer cuando el dueño del lote al no poder cultivar, ya que la tierra era muy húmeda, decidió poner en venta hectáreas y cuando las máquinas retroexcavadoras removieron el suelo allí comenzó a salir humo hirviendo.
Durante mucho tiempo diversos especialistas, bomberos y policía trabajaron en la zona para poder corroborar con exactitud el origen de este problema. En estos momentos, al no encontrar todavía una conclusión, personal del municipio acude cada tanto al lugar para mojar la tierra con un camión y mangueras.