Imputan a padre e hijo por balacera que mató a Claudia Deldebbio y dejó grave a su hija Viriginia
El fiscal Patricio Saldutti, a cargo de la investigación, acusó a ambos de protagonizar –junto a otras tres personas aún no identificadas- la balacera a cambio de una “promesa remuneratoria” que se concretó.
Detrás de la balacera, según los indicios de la investigación, está René «Brujo» Ungaro, quien cumple condena por el asesinato en 2010 del entonces jefe de la barrabrava de Newell’s Old Boys, Roberto “Pimpi” Caminos y está imputado en causas por asociación ilícita en la Justicia provincial.
Saldutti acusó durante una audiencia de ayer por la mañana a Fernando David Cortez, de 45 años, y a su hijo Lautaro, de 19, de disparar la tarde del 23 de julio pasado hacia la Torre 11 de un monoblock ubicado en Isola y Maestros Santafesinos, ubicada en el Fonavi del Parque del Mercado, y “contra las personas que se encontraban en la parada de colectivos ubicada al este de la ochava de Isola al 400 bis, con la clara intención de causar la muerte de personas ajenas a cualquier tipo de conflicto”.
Como consecuencia de los disparos fue asesinada la maestra jubilada Claudia Deldebbio, de 57 años, y resultó gravemente herida su hija Virginia, de 31, quienes esperaban el colectivo en esa esquina. También sufrió heridas, aunque de menor gravedad, un adolescente que estaba en la plaza Rodolfo Walsh ubicada detrás de la parada de ómnibus.
Según la investigación, esa tarde dos automóviles llegaron hasta el lugar del ataque.
Saldutti sostuvo que de acuerdo a la evidencia recogida, uno de los vehículos era conducido por Lautaro Cortez. Cuatro personas bajaron del auto, entre ellos su padre, y abrieron fuego contra la torre 11 del edificio en una acción que buscó “causar temor en la zona y herir o matar a cualquier persona ajena a los conflictos”, dijo el fiscal luego de la audiencia.
“El ataque no estaba dirigido a quienes resultaron víctimas”, afirmó Saldutti, para quien los atacantes “habrían recibido un pago de dinero para cometer este hecho y otros más que también se mencionan, cuyas investigaciones están abiertas, sobre otros homicidios en la zona”.
La Fiscalía avanza en la línea investigativa para demostrar que quien pagó el ataque fue El Brujo Ungaro, que además de cumplir condena por el homicidio de Caminos, el año pasado fue sentenciado por la justicia provincial a 7 años de cárcel como líder de una violenta asociación ilícita que cometía amenazas y usurpaciones en tres barrios de la zona sur. También posee una condena a 12 años en el fuero federal como organizador de una banda dedicada al narcotráfico junto a los hermanos Alan y Lautaro «Lamparita» Funes.
El fiscal también acusó a los dos detenidos por portación y tenencia ilegítima de arma de fuego y encubrimiento, además de homicidio y tentativa de asesinato, indicaron voceros judiciales.
Al ser arrestado el jueves por la noche, la Policía les secuestró un arma que, según la investigación, había sido robada a un gendarme y tenía pedido de secuestro.
El juez de la audiencia, Román Lanzón, aceptó la imputación fiscal y dictó la prisión preventiva por dos años a los acusados, agregaron voceros del Ministerio Público de la Acusación (MPA).