El acto de la cesión en comodato fue valorado por el subsecretario de Seguridad y Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad, Rubén Becerra, quien recordó que «se está dando un paso más en este largo camino que comenzó la institución y que se puede materializar luego de cumplir los pasos administrativos».
Además de la entrega de los terrenos, el gobierno del Chubut, a través del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Industria y Comercio, realizó una inversión de $ 3.523.000 para que puedan avanzar con la infraestructura en ese espacio.
En representación de la filial Puerto Madryn de «Mamá Cultiva» estuvo presente su presidenta, Berta Thachek, una activista que luchó por años procurando el derecho a producir cannabis para uso medicinal y logró que la Justicia le permitiera cultivar para su hija.
«Buscamos desde un principio que cualquier madre pueda cultivar tranquila con fines medicinales, que si se sufre algún robo pueda denunciar, que no tengamos allanamientos en nuestras casas, ni causas federales y que ya no haya más presos por cultivar y lo fuimos logrando», explica Berta.
La cesión de tierras también fue destacada por el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre, quien recordó: «El trámite lo iniciamos el año pasado y ahora se concreta algo que llevó su camino».
Estuvieron en el acto protocolar que se realizó ayer, el subjefe de la Policía del Chubut, Juan Cruz Campos, el jefe de la Unidad Regional de Puerto Madryn, Javier Loyola, y el subsecretario de Atención Primaria del Ministerio de Salud, Roberto Neme.
Con este paso, a partir de las próximas semanas, la institución ‘Mamá Cultiva’ podrá desarrollar el cultivo de cannabis medicinal en el terreno.
Tanto el subsecretario Becerra, como el intendente Sastre, señalaron la importancia de estas acciones y anticiparon que habrá un diálogo permanente para avanzar en otro tipo de iniciativas que generen beneficios concretos para la comunidad.
El intendente, en diálogo con Télam, consideró que «esta es una forma de dar una respuesta positiva y concreta que las mamás estaban buscando desde hace un buen tiempo y que les permitirá producir en el ámbito de la fuerza pública sin ningún prejuicio, porque la repartición tiene el espacio adecuado para el autocultivo que hasta ahora se viene realizando en los hogares».