El 3 de noviembre de 1985, Napoli recibía la visita del poderoso Juventus por una nueva jornada de la Liga italiana. Bajo un diluvio, el partido se definió por una genialidad de Diego que se clavó en el ángulo. La emoción de los hinchas napolitanos fue tal, que en medio de los festejos por la joya del Diez, se reportaron 5 desmayos y 2 infartos en las tribunas.