Lionel Messi cumplió su sueño y seguramente el de muchos más. Haber levantado la Copa del Mundo en el estadio Lusail rubrica una historia con final feliz entre el rosarino y la selección.
“Es una locura que se haya dado de esta manera. Lo deseaba muchísimo. Sabía que Dios me lo iba a regalar, presentía que iba a ser esta. Ahora a disfrutar”. expresó Messi ni bien recibió en manos de Gino Infantino la Copa del Mundo.
Diego Maradona tardó dos mundiales en gritar campeón. Pero a Lio le costó más. En Alemania 2006 era apenas un pibito que Pekerman decidió no arriesgarlo. En Sudáfrica 2010, con Diego como DT, el sueño se hizo añicos con Alemania. En Brasil 2014, los germanos le quitaron a la Pulga el título en suplementario. En Francia 2018, Francia lo hizo volver a casa en octavos. Pero en Qatar el desenlace fue otro. El capitán y emblema de la Albicleste logró tocar el cielo con las manos.
“Se hizo desear pero acá llegó. Mirá lo que es esta copa, es hermosa. Sufrimos un montón, pero lo conseguimos. No vemos la hora de estar en la Argentina para ver la locura que va a ser eso”, manifestó un exaltado Messi, que no ve la hora de regresar al país para disfrutar un título que se le negó al seleccionado por 36 años.
Quizás Messi no esté presente en el próximo Mundial. Más que nada por su edad (tendrá 39 años), pero quien le quita la felicidad del hoy.
“Cerrar mi carrera de esta manera, porque seguramente son mis últimos años, es algo impresionante”, aseguró el Capitán.
Por último y ante la consulta de un posible retiro de la Albiceleste, el rosarino fue claro y tajante al compartir su idea de, al menos, jugar unos partidos más.
“No, no me voy a retirar de la selección nacional. Quiero seguir jugando como campeones del mundo con la camiseta de Argentina”, subrayó el rosarino.»