Comenzó la cuarta jornada del juicio oral contra los ocho rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa. Por primera vez, los acusados entraron a la sala del Tribunal sin barbijo.
Se espera que durante este jueves declaren en el TOC 1 de Dolores, Policías, testigos y el remisero que presenció el momento del ataque. Tal como se viene repitiendo desde el lunes, los papás de Fernando ingresaron al Tribunal para asistir junto al equipo de abogados defensores.
El miércoles testificaron Pablo y José Ventura, amigos de la víctima, empleados de seguridad del boliche Le Brique y Policías de Villa Gesell. El relato más conmovedor fue el de Muñóz, jefe de los patovicas del local bailable, que sostuvo que en sus 20 años de profesión nunca había vivido algo así.
Además, durante el transcurso de la tarde se confirmó que los rugbiers recibirían a sus familiares en el Penal de Dolores. Aunque fue un grupo pequeño se los pudo observar en la entrada y salida con bolsas.