Una misión del equipo económico encabezada por el ministro Sergio Massa se reunirá a partir de este martes en Brasil con funcionarios y empresarios de ese país para intentar dinamizar el comercio bilateral, en el marco de la visita oficial del presidente Alberto Fernández.
El ministro de Economía, Sergio Massa, encabezará la delegación económica argentina y estará secundado por el jefe de Gabinete de asesores del Palacio de Hacienda, Leonardo Madcur, y por el vicepresidente del Banco Central, Lisandro Cleri.
El viceministro de Economía brasileño, Gabriel Galípolo, anticipó que Brasil le propondrá a la Argentina la creación de una línea especial de financiación a las empresas brasileñas que le venden a la Argentina en monedas locales y así mantener el flujo del comercio bilateral entre los dos principales socios del Mercosur.
«Estamos proponiendo la creación de una financiación a las empresas brasileñas que venden a la Argentina y son esas empresas que venden servicios y mercaderías de Brasil dadas las restricciones que se verifican en Argentina», dijo Galípolo, coautor con el ministro de Hacienda de Brasil, Fernando Haddad, del proyecto para una moneda común de comercio exterior sudamericana llamada «Sur».
Massa y su equipo se reunirán este miércoles con el presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Financieras (CNF), Rodrigo Maia, para aumentar las relaciones financieras con los bancos y con la Bolsa de Valores. Ese mismo día están previstos anuncios referidos al desarrollo de la Economía del Conocimiento y sobre el Plan Argentina Irrigada.
El jueves, la misión hará anuncios sobre medidas de promoción para la siembra de trigo y el viernes se cerrarán las reuniones con anuncio del Plan de Pagos para Pymes que mantienen empleo, sobre el Impuesto a las Ganancias y el lanzamiento de un fondo de asistencia para la avicultura, según consignaron fuentes del Palacio de Hacienda.
Galípolo explicó que 210 empresas brasileñas comercian habitualmente con Argentina. Afirmó que Brasil ha dejado en los gobiernos de Michel Temer y de Jair Bolsonaro de financiar sus exportaciones y mecanismos de compensación con la Argentina, lo cual permitió el avance de China como principal vendedor de los argentinos.
«En los últimos cinco años, debido a la falta de mecanismos de Brasil para financiar las exportaciones brasileñas y las importaciones argentinas, hemos perdido aproximadamente 6.000 millones de dólares de espacio en la balanza comercial con Argentina a China, que ha estado proporcionando mecanismos de financiación en medios alternativos de pago, como swap, o dando crédito al exportador», dijo el funcionario a la cadena de noticias GloboNews.
Galípolo destacó que para Brasil es un mercado exportador diferenciado ya que consume productos de valor agregado, que son necesarios para mantener el empleo brasileño, y subrayó que la necesidad de esta línea de crédito se agrava este año debido a una sequía en la Argentina, que redujo las exportaciones en un 40%, una pérdida de alrededor de 17.000 millones de dólares.
«Esto perjudica un poco la situación de Argentina este año. Pero para Brasil tenemos 210 empresas que comercian con el país, principalmente en valores industriales, con más valor agregado», dijo el funcionario.
En este marco, el Gobierno de Brasil propondrá que estas líneas de financiación a la exportación sean pagadas directamente a las empresas brasileñas en pesos para luego convertirlas en reales y así cubrir la deuda de la financiación.
Desdolarizar
La idea de comenzar a modificar las divisas implicadas en el comercio bilateral tiene antecedentes: hacia fines del año pasado, comenzó a explorarse la posibilidad de una moneda llamada «Sur» y, en las últimas semanas, el propio Lula habló varias veces sobre una desdolarización del intercambio.
«Estoy a favor, en el caso de Brasil con Sudamérica, de que creemos una moneda para comerciar, que aquí en los Brics (la coalición de Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) se cree una moneda de comercio entre nuestros países, como los europeos crearon el euro«, dijo el miércoles pasado Lula en su paso por España y Portugal.
La agenda de los Brics es también un punto que interesa al Gobierno argentino: Fernández ya expresó su intención de formar parte de ese foro en sus diálogos con el propio Lula, pero también con el primer ministro indio, Narendra Modi, el mandatario chino Xi Jinping y, antes de la guerra en Ucrania, con el ruso Vladimir Putin.