El fiscal federal Fernando Arrigo pidió este lunes que sean condenados a prisión perpetua 14 policías de los 19 acusados por la desaparición forzada seguida de muerte de Franco Casco, el joven de 22 años hallado sin vida en el río Paraná en octubre de 2014, 23 días después de haber sido detenido en la seccional 7ª de barrio Luis Agote. Para el resto de los acusados solicitó una absolución y penas de entre 3 a 14 años de prisión para cuatro agentes y un civil por los delitos de encubrimiento, falso testimonio y participación secundaria en la desaparición del joven.
El pedido se dio en el marco del juicio que se lleva adelante ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) N° 2 de Rosario, en el cierre de los alegatos. El fiscal Arrigo dio por probado que el hecho se trató de un caso de “desaparición forzada de persona, agravado por la muerte de la víctima e imposición de tortura a persona privada de su libertad”.
Por lo tanto, solicitó la prisión perpetua para los policías Walter Benítez, Fernando Blanco, César Acosta, Guillermo Gysel, Cintia Greiner, Rocío Hernández, Marcelo Guerrero, Enrique Gianola Rocha, Esteban Silva, Diego Álvarez, Cecilia Contino, Ramón Juárez, Romina Díaz y Franco Zórzoli.
A su vez, el fiscal pidió una condena de 14 años y 10 meses de prisión e inhabilitación absoluta para Belkis González y Rodolfo Murua, a quienes consideró “partícipes secundarios”.
En tanto, solicitó una pena de 5 años y 10 meses de prisión e inhabilitación por encubrimiento para Pablo Síscaro y Daniel Escobar, al tiempo que solicitó la absolución de Walter Ortiz.
Durante el alegato, Arrigo sostuvo que Casco “fue privado de su libertad, admitido con falsedades por los imputados”.
El fiscal consideró que tras haber torturado, asesinado y arrojado al río al joven, los policías acusados generaron “una coartada para desvincularse de sus responsabilidades”.
El juicio a estos 18 efectivos y un civil comenzó hace un año y medio y durante su desarrollo declararon unos 200 testigos.
Casco tenía 22 años y era oriundo del partido bonaerense de Florencio Varela. En octubre de 2014 viajó a Rosario a visitar a unos familiares.
El 6 de ese mes fue visto por última vez cuando se disponía a viajar en tren para regresar a Buenos Aires.
Finalmente, el cuerpo de Casco fue encontrado el 30 de octubre flotando en el río Paraná.
Y por el caso imputaron a efectivos de la comisaría 7ª de Rosario donde estuvo alojada la víctima antes de morir y de Asuntos Internos.