Tras la viralización de las imágenes en las que se observa al flamante avión presidencial realizar maniobras polémicas que despertaron críticas en redes sociales, desde la Fuerza Aérea Argentina aclararon que la aeronave no depende del Ministerio de Defensa y subrayaron que sus pilotos no son personal militar.
Luego de la llegada al país, el ARG 01, denominación que recibe el Boeing 757-200 , generó cuestionamientos dado que los comandantes Juan Pablo Pinto y Leonardo Luis Barone, efectuaron movimientos rasantes sobre la pista de lanzada de Aeroparque Internacional Jorge Newbery.
La aclaración llega luego de que la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac) abriera un expediente para analizar las maniobras realizadas, que no avanzó ya que desde la institución se alegó que la tripulación estaba bajo la órbita del Ministerio de Defensa.
«En relación a las publicaciones periodísticas referidas a las maniobras realizadas por los comandantes del ARG-01, la Fuerza Aérea Argentina aclara lo siguiente», inicia la enumeración publicada a través de las redes sociales de la fuerza. En sintonía explica que el ARG-01 «se encuentra fuera del ámbito del Ministerio de Defensa», y que no posee «matrícula militar».
Desde la Fuerza Aérea se indicó además que “dicha aeronave depende de la Secretaría General de Presidencia”, y que los pilotos «tienen licencia civil” por lo que aclararon que “es la Anac la única que tiene facultades para tomar cualquier tipo de medidas relacionadas con el personal involucrado y la operación en cuestión”.
Al tratarse de un avión civil, la Anac tiene las facultades para implementar sanciones contra los pilotos que realizaron la maniobra.
El gobierno reemplazará con el nuevo ARG01 el Tango 01, aeronave adquirido por el Estado durante el gobierno de Carlos Menem, pero que ya hace varios años que no viaja.
El avión llevó una inversión cercana a los 25 millones de dólares y tiene capacidad para transportar 39 pasajeros.