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Tiros, corridas y un balazo en ventana de la escuela Francisco Netri llevó a la suspensión de clases

Este lunes por la tarde hubo seis disparos en inmediaciones de la cuadra Ayala Gauna al 8000, donde funcionan dos instituciones educativas. No está claro si los balazos fueron contra el edificio, pero comprobaron un impacto en la primaria y la Policía levantó cinco vainas servidas

Una saga de disparos en la tarde de este lunes donde uno de los proyectiles impactó en las oficinas del primer piso de la escuela primaria N°1346 Francisco Netri motivó a sus directivos y a las autoridades del jardín de infantes N° 71 Pedacito de Patria a suspender las clases durante este martes, de acuerdo a los carteles que pusieron en las rejas de las instituciones que comparten edificio en Ayala Gauna al 8000, de barrio 7 de Septiembre.

“Los tiros fueron en la canchita, atrás del Polideportivo y del dispensario, que están en la otra cuadra por Martínez de Estrada. Se escucharon seis y la Policía encontró cinco vainas 9 milímetros. Se ve que unos corrieron para el lado de la escuela, les dispararon y le pegó a la ventana”, fue la secuencia que repitieron algunos vecinos y allegados a la escuela primaria sobre el impacto que quedó en una de las ventanas del primer piso.

https://twitter.com/elciudadanoweb/status/1666194584202891264?s=20

Las detonaciones se escucharon pasadas las 18 cuando los y las alumnas de primaria del turno tarde ya se habían ido y a pesar de que la hipótesis más fuerte es la de un daño colateral a un enfrentamiento entre dos grupos, los directivos tanto de la escuela Francisco Netri como del Jardín junto a la supervisora del Ministerio de Educación dispusieron que este martes no se dictaran clases para “prevención de los episodios de inseguridad”.

Los directivos del Jardín de Infantes lindero también suspendieron este martes las clases. Foto: Juan José García.

 

La directora, vice junto a maestras y referentes del gremio Amsafé  estuvieron en la institución y esperaban reunirse con las supervisora y funcionarios de la cartera de Educación para determinar los pasos a seguir.

Tras los disparos de este lunes, algunos vecinos consultados por El Ciudadano se sorprendieron porque refirieron que «últimamente estaba todo tranquilo» en esa zona donde en dos manzanas funcionan la escuela primaria, el jardín de infantes, una canchita de futbol, una plaza, el polideportivo y el dispensario.

Claudia Lioy, supervisora de escuelas primarias, explicó a este diario: “La bala impactó en uno de los ventanales de las oficinas, del primer piso, del área de Gestión. No estaban los alumnos, ni directivos ni docentes en la institución. Se puso en práctica el protocolo y se hizo la denuncia correspondiente. Todo está en proceso de investigación”.

Según la funcionaria, una de las hipótesis que se maneja es que hubo un enfrentamiento en la plaza que está enfrente y la bala pegó en uno de los vidrios del establecimiento. “La escuela está cerrada para preservar a los niños. Este mediodía tenemos una reunión con jefatura de supervisión,  que está en contacto con el Ministerio de Seguridad para pensar estrategias”, concluyó Lioy para agregar que no recibieron notas como tampoco mensajes intimidantes.

“La semana pasada el Jardín recibió una amenaza desde un perfil de Facebook pero luego lo borraron enseguida. Se aplicó el protocolo, pero no es la hipótesis más fuerte en este caso”, agregaron algunas personas que estaban junto a la supervisora.

Antecedente inmediato

Una institución educativa ubicada en barrio Las Flores recibió una nota amenazante este domingo a la noche. El establecimiento no iba a tener actividad escolar por duelo, debido al fallecimiento de un alumno. Se trata de la escuela Nuestra Señora de Itatí, ubicada en Flor de Nácar al 7000.

Martín Lucero, secretario general de Sadop Rosario afirmó: “El domingo por la noche, el padre de un alumno dio aviso al personal docente de que habían dejado una nota intimidatoria en la puerta de la institución, lo que motivó en una denuncia de parte de la directora ante la comisaría 21ª”.

Y agregó: “Se cambió el eje. No es lo mismo, en las amenazas de bomba no hubo una que se haya materializado, en cambio, sí hubo balaceras contra las puertas de los colegios”.

Por último, el secretario general de Sadop Rosario sostuvo que “hay que trabajar con las familias”. “Lo que no podemos hacer es menospreciar porque no todas fueron por travesuras”, cerró.

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