La noticia es fuerte para el básquet de Rosario, aunque por la buena voluntad de sus protagonistas es probable que no incida directamente en el desarrollo normal de las competencias locales. Un gran grupo de árbitros que asiduamente dirigen en la Asociación Rosarina de Básquet le elevó a Sergio Pezzotta, Director General de la Cooperativa de Árbitros Deportivos, un pedido para desvincular a Miguel Celi como Secretario General de CADEP y que deje de tener injerencia en las designaciones de los certámenes locales.
Sobre el tema, los jueces Jeremías Miraglia, Facundo Cascardo y Néstor Timpanaro dieron su mirada y explicación en representación de sus más de 40 compañeros.
“Las exigencias son para Cadep y no para la Rosarina, ya que somos árbitros de la cooperativa que le prestamos un servicio a la Rosarina. Y la situación surge por problemas con Miguel Celi, quien es la cabeza de Cadep en el básquet, por las designaciones, manejo de grupo y trato con los chicos”, explicó Miraglia y detalló cuál fue el punto de inflexión: “Se hizo una reunión con los árbitros de nivel avanzado sobre todos los temas que se suelen tratar al inicio de temporada, ropa, aranceles, designaciones, entrenamientos, colegio de árbitros, y allí surgieron una serie de opiniones y anécdotas de inconvenientes o malas experiencias con Miguel”.
“Tras analizarlo, fue unánime la idea de que no se podía seguir así, porque a todos los proyectos que presentamos les ponían trabas y se decidió presentar la nota a Pezzotta”, resumió.
Facundo Cascardo reforzó la idea: “Hay designaciones viciadas, quintas armadas, grupos chiquitos que dirigen siempre la reserva, y un solo árbitro llegó a tener diez partidos de esa categoría. Se hizo todo muy cuesta arriba y por eso pedimos que no esté más, sobre todo en las designaciones porque ejerce mal el poder”.
“Después de la presentación de la nota a Cadep empezaron a llegar los llamados para recriminar que se reunían los jueces o se juntaban con nosotros. Y Pezzota expresó que iba a generar un movimiento para correr a Miguel de ese lugar. Pasó casi un mes en el que se presionó con las designaciones y lo que hicieron fue armar un nuevo colegio, pero en la realidad no se cumplió con lo pedido, se mantuvo a Celi atrás. Y en algunos casos hay gente que no está capacitada para analizar actuaciones arbitrales y hoy está designando. Que quede claro que no nos referimos a la gente de la Rosarina, que por estatuto le corresponde estar a cargo de esa labor”, añadió Miraglia.
Los jueces están esperando esta nueva reunión con Pezzotta para avanzar en el tema y la muestra de paciencia es absoluta, ya que esta situación ya tiene varios meses.
“No estamos divididos, estamos todos juntos por el mismo objetivo, basta de feudo, basta de maltratos, basta de amenazas. Que a la cabeza haya alguien que trate bien a los jueces”, añadió Miraglia.
Todos coincidieron en que quieren seguir ligados a Cadep, pero que tienen propuestas en el caso de llegar a un punto límite.
“El proyecto avanzó. Nosotros queremos seguir perteneciendo a Cadep, pero queremos que Pezzotta escuche a los árbitros de básquet. En algún momento va a tener que dialogar y consensuar. Hay una nota firmada por 40 árbitros, no puede hacer oídos sordos”, explicó Cascardo.
Timpanaro aclaró que “esto no es una cuestión personal, es una convicción en el proyecto que tiene que llevarse a cabo, que es el desarrollo del árbitro rosarino”. “Esta situación va a mostrar quien tiene ganas de llevarlo adelante y quien no. Si no tenemos lugar en el que desarrollarlo, vamos a encontrar el lugar, aunque tiene que quedar claro que queremos quedarnos en Cadep”.
“Van a minimizar esto y querer decir que es un tema de plata. Y es verdad que no estamos ajenos a la economía del país, pero esto dejó de ser por plata, es por dignidad, por convicción y por proyecto. Hay cosas que tienen fecha de vencimiento y esto ya se vició”, disparó Cascardo.
Miraglia contó: “Ya se nos acercaron grupos para darnos propuestas, pero no queremos faltar el respeto a nadie”.
“Esto es algo interno y no tiene que verse afectada la rosarina ni los clubes. Es una cuestión de árbitros, no es político”, añadió Timpanaro, quien detalló algo más del proyecto a desarrollar si se los permiten: “Los árbitros no van solo por la plata, les gusta, quieren mejorar. Es un oficio y tiene que haber una guía, desarrollar a los que tienen potencial y no tienen donde consultar o apoyarse, en este momento es solo ir a tal cancha y dirigir. Queremos volver al seguimiento de video, a tener un lugar o persona a quien consultar, hoy todo lo que habíamos planteado y comenzado a llevar a cabo se cortó”.
“Hay material de árbitros que hay que terminar de perfeccionar y también desarrollar nuevos. No se puede depender de que le caiga mal o te guste la cara para darle oportunidades y muchas veces los árbitros jóvenes tienen problemas porque se los manda a los partidos sin herramientas e información. Hoy el colegio está acéfalo hace más de un año y un designador que acomoda según le conviene”, coincidieron.
“Hoy se puede seguir escalando, los árbitros de la cooperativa llegaron al Federal gracias en buena parte a la gestión de Marcelo Turcato (vice de la Rosarina) porque antes estábamos bloqueados. Hay tres árbitros en el Federal, un árbitro 3×3 en Fiba y hay posibilidades de seguir creciendo, pero tenemos que capacitar. Hoy en día hay una situación límite en el arbitraje de Rosario en la que si no se encara un proyecto serio y sin segundas intenciones, van a tener que salir a buscar árbitros de afuera porque hay mucha deserción”, cerró Cascardo.
La carta
“A través de la presente queremos poner en conocimiento de usted, y por su intermedio a los miembros de la Comisión Directiva de nuestra cooperativa que los árbitros abajo firmantes, quienes actualmente están afiliados a C.A.D.E.P., queremos presentar un nuevo Proyecto para la Escuela de Árbitros de Básquet.
Motiva nuestro pedido, el hecho de que no compartimos las formas de gestionar y tampoco las decisiones, absolutamente arbitrarias, del señor Miguel Ángel Celi, debido a que no cumple con el objetivo principal del colegio, ya que se encuentra paralizado el proceso de formación, el potenciamiento del colegio y profesionalización del mismo.
Solicitamos que se desvincule del cargo que actualmente ejerce como Secretario General de C.A.D.E.P. Rosario, ya que no nos sentimos representados. Además, que no pueda realizar las designaciones arbitrales de ningún torneo y que tampoco participe de las clases formativas de aspirantes y avanzados, debido al malestar general producido por su accionar y maltrato hacía los miembros de C.A.D.E.P.
En caso de ser aprobada nuestra propuesta quisiéramos establecer de manera democrática al nuevo representante.
Quedando a la espera de una pronta y favorable respuesta, aprovechamos la oportunidad para saludarlo con la cordialidad más distinguida”.
Bases del proyecto para el futuro
A su vez, este grupo de jueces tienen previsto un proyecto renovado para el Colegio de Árbitros apuntando a los diferentes aspectos que permita profesionalizar la actividad.
Los ejes principales explican desde las clases teóricas, los entrenamientos físicos, la implementación de un Instructor líder, así como el trabajo en la mecánica, en idioma, estudio de juego, psicología arbitral, y una plataforma digital, además de la mirada de género.
Otra parte importante del proyecto apunta a ampliar la capacitación en charlas y clínicas, así como la capacitación de jueces para que pasen a ser comisionados, la implementación de becas para quienes lo necesiten, y los exámenes nivelatorios.
