Rosario, 25 de julio de 2023
“Lo esencial es invisible a los ojos”
(Antoine de Saint-Exupéry)
Estimado Fito:
Tus declaraciones contra la Revolución Cubana me causaron decepción. Decía Hamlet Lima Quintana que “el artista y el hombre son indivisibles”. Tus expresiones recientes distorsionan esa armonía indivisible entre el hombre y el artista, que yo creía ver en vos. Afectan mi valoración sobre gran parte de tu obra.
“Quién dijo que todo está perdido; yo vengo a ofrecer mi corazón” es un sinónimo de esperanza ante las adversidades, es acompañamiento ante quienes sufren injusticias, es la lealtad de un amigo incondicional. Me brindaba la posibilidad de acercarme al artista y al hombre. ¿En qué punto esa sensibilidad por la injusticia se pasó al lado del opresor de Cuba y de todos nuestros países latinoamericanos y caribeños?
Otro gran artista, Horacio Guarany, en su canción “Milonga de la riqueza” expresaba que “…tiene el hombre que aprender mil cosas para vivir; pero les voy a advertir, que antes de llorar sus penas, el hombre debe saber las causas de sus problemas”. Y me pregunto: ¿Dónde quedó tu sensibilidad que interpretaba las causas de los problemas y la defensa de las causas justas?, “…no creas que perdió sentido todo”.
El memorando del vicesecretario de Estado para Asuntos Interamericanos de los Estados Unidos, Lester Mallory, presentado el 6 de abril de 1960 al presidente Eisenhower, dice textualmente: “La mayoría de los cubanos apoyan a Castro… el único modo previsible de restarle apoyo interno es mediante el desencanto y la insatisfacción que surjan del malestar económico y las dificultades materiales… hay que emplear rápidamente todos los medios posibles para debilitar la vida económica de Cuba… una línea de acción que, siendo lo más habilidosa y discreta posible, logre los mayores avances en la privación a Cuba de dinero y suministros, para reducirle sus recursos financieros y los salarios reales, provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del Gobierno”, esto es lo que sucede desde hace 64 años en Cuba. Deberías sumar tu voz, y el impacto social que tiene, a la lucha contra el bloqueo y no a acallar el reclamo sobre esta acción deleznable.
Comparto tu opinión sobre la pena de muerte, también me opongo a esa pena capital. El Código Penal en Cuba, como en otros países (incluido EE.UU), contemplan la pena de muerte para determinadas acciones delictivas. Recuerdo, de Cuba, las ejecuciones del General Arnaldo Ochoa, junto al coronel Antonio de la Guardia, el capitán Jorge Martínez
Valdés y el mayor Amado Padrón Trujillo, todos ellos juzgados y sentenciados por narcotráfico, en el año 1989. Luego recuerdo la de esos tres terroristas, a los que hacés referencia, que habían secuestrado una embarcación con 50 turistas, en el año 2003. En ese mismo período de tiempo, en EE.UU se ejecutaron 1441 personas; de las cuales 16 eran menores de edad y 34 con deficiencias mentales (datos de Amnisty.It). EE.UU ha declarado, unilateralmente, una guerra a Cuba y es, en ese marco, que se juzga y ejecuta a estos cubanos. La aplicación de estas legislaciones es en tiempos de guerra. El bloqueo comercial, económico y financiero se constituye en una declaración de guerra a la que hay que sumar otras acciones terroristas contra Cuba que causaron más de 3 mil muertos.
Desconozco los motivos y causas que provocaron tus declaraciones, a las que considero alejadas de la realidad histórica, con desconocimiento de los hechos a que hacés referencia y que no hacen más que incluir tu voz en la guerra de cuarta generación que impulsa en estos años EEUU contra Cuba. Desconozco si, sos conscientemente parte de esto o, es un exabrupto emocional.
Si puedo afirmar, que todo lo que dijiste contra la Revolución Cubana no es original. Esos mismos argumentos los han esgrimidos otros artistas, deportistas, escritores y políticos serviles a los EEUU. Son las mismas palabras. Y, como somos sujetos sociales, es de suponer que en el ámbito más cercano a vos, el más estrecho, es esa la recurrente argumentación que escuchás. Entiendo que provienen de quienes ambicionan fama y dinero y se venden al dios mercado, el que es manejado desde EEUU y, especialmente en lo artístico, desde Miami.
No espero que te declares incompetente en todas las materias del mercado, ni que te declares inocente, ni que seas abyecto y desalmado. Te pido que no pienses que todo está perdido y que vuelvas a ofrecer tu corazón. No a quienes nos saquean y ultrajan, sino a quienes soñamos que un mundo mejor es posible.
El camino de regreso es difícil, pero aquí te esperamos, si estás dispuesto a recorrerlo. De no ser así habremos perdido una voz para nuestras luchas y habrá ganado el enemigo, con la conversión de uno de los nuestros.
Te saludo, con decepción pero con una pequeña esperanza.
Norberto “Champa” Galiotti (Secretario PC de Rosario – Coord. Red Continental Latinoamericana y Caribeña de Solidaridad con Cuba)