Messi siempre es Messi. En Argentina, en Barcelona, en PSG, en Inter Miami. El rosarino destrabó un partido durísimo para derrotar a Ecuador en el debut de las Eliminatorias rumbos al Mundial 2026. La falta que marcó el colombiano Roldán en el borde del área de la visita presagiaba el grito de gol. Y el capitán no falló. A pesar de que Galíndez armó una nutrida barrera, con un jugador acostado en el piso incluido, la Pulga encontrò el espacio justo para inflar la red rival.
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El primer tiempo le costó imponer su juego a Argentina. Y eso fue porque la Scaloneta nunca le encontró la vuelta al planteo de Ecuador. Las cartas estaban sobre la mesa. La visita se paró con cinco atràs, tres volantes bien definidos y dos de punta. Con eso le alcanzó para no sufrir ante el seleccionado campeón del Mundo.
Argentina careciò de juego. Algo que le sobró en Qatar. Demasiadas impresiciones en jugadores que habitualmente no las tienen comno Enzo Fernández o Alexis Mac Alister. No sobraban espacios en la defensa de Ecuador y la Albiceleste jamás los pudo encontrar. Apenas un remate de Messi que se fue cerca del palo izquierdo de Galìndez.
Ecuador ni siquiera hizo transpirar al Dibu en la primera parte. La idea era clarísima. Aguantar y meter alguna contra.
Sobre el final la gente comenzó a calentar el ambiente y la Scaloneta mostró su mejor versiòn. Lautaro Martìnez lo tuvo, pero el palo le devolvió el remate.
En el complemento Argentina entró con otro semblante. El equipo pudo imponer su estilo, pero le faltaba profundizar en los metros finales. Jugó unos metros más adelantado y eso hizo que Ecuador se agazape para alguna contra letal.
Scaloni motivó el ingreso de Di María por el errático González a los 16 minutos para buscar más volumen de juego. Messi tuvo una clarísima, pero su remate débil fue atrapado por Galíndez.
A los 30 minutos llegó el estallido. Tiro libre al borde del área es sinónimo de gol cuando está Messi en cancha. La Pulga se hizo cargo y con un suave remate de zurda hizo estallar el Monumental. Y no solamente para que Argentina se ponga al frente del marcador, sino tambièn para igualar a su amigo Luis Suàrez como máximos goleadores de las Eliminatorias Sudamericanas.
Ese tanto agrandó a la Scaloneta. Di María se mostrò siempre. Julián Álvarez (entrò por Martínez) se acopló bien. De Paul se amigó de la pelota.
A Lio se le acabó la nafta y Scaloni mandó a la cancha al tucumano Exequiel Palacios. Ovación total para el capitàn. El rosarino cumplió con otro dìa en la oficina y Argentina debutó en las Eliminatorias con un triunfo ante Ecuador. Ahora a descansar y planificar la excursión del martes en la temida altura de Bolivia.
