Trabajadorxs de la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, nucleadxs en ATE Rosario, llevan adelante un paro por 60 horas desde este martes al viernes, denunciando los recortes presupuestarios y, con ellos en los salarios del personal. Exigirán aumento de emergencia del valor hora para salir de la línea de pobreza. Piden adhesiones para visibilizar la realidad crítica del sector.
Luego de realizar medidas esta semana, volvió el paro en Niñez. “Si bien es un problema estructural, ante las enormes irresponsabilidades persistentes actuales, toda la posibilidad (de lxs niñxs y adolescentes) de ejercer una vida digna recae sobre lxs trabajadorxs de la salud que ya se han expresado oportunamente, pero también sobre lxs acompañantes personalizadxs que terminan siendo voz y ojos de las condiciones en las que viven”, expresa el texto difundido por la Junta Interna de ATE en la dependencia provincial.
Y denuncia: “esta función la realizamos sin el reconocimiento derechos laborales básicos (licencia por enfermedad, estudio, aportes jubilatorios, obra social, vacaciones y cuidados en nuestro núcleo familiar), con un valor de hora de trabajo en $500 con el cual no llegamos a $90.000, aun haciendo 180 horas mensuales, por lo que estamos debajo de la línea de pobreza del Indec (para Septiembre $118.500). Siendo histórico el incumplimiento del impacto de los acuerdos paritarios que implicarían aumentos en el valor de nuestra hora de trabajo automáticamente”.
Sumando iniciativas a sus extensos reclamos, dieron a conocer la siguiente declaración para sumar adhesiones. “Pedimos la adhesión de colectivos y figuras públicas para dar a conocer la preocupante situación de este sector de trabajo, exigir regularización sobre lo trabajado, las condiciones laborales y el uso de los presupuestos”, plantean desde ATE Rosario y la Junta Interna de Niñez. Se puede firmar en el siguiente link: https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScKOXrrmhANKSU85Jg2mxh5yjO-npWgKo4JPvCWmBdjJaSL4g/viewform?vc=0&c=0&w=1&flr=0
Declaración de emergencia en niñez y adolescencia
A claras expensas de que somos quienes resguardamos -sin condiciones, ni recursos- las niñeces y adolescencias que la gestión de Omar Perotti, Danilo Capitani y Patricia Chialvo han dejado agudizar en su malestar, al punto tal de ser “noticia”, lxs trabajadorxs que cumplimos tareas de acompañamiento personalizado y terapéutico organizados en ATE Rosario NOS DECLARAMOS EN EMERGENCIA INSTITUCIONAL, continúa el texto.
Ante las reiteradas expresiones de preocupación por parte de diferentes colectivos de trabajadores y profesionales sobre el estado de vulneración de los niños, niñas y adolescentes que se encuentran bajo tutela y protección de la Dirección Provincial de Protección de Derechos de la Niñez y Adolescencia, lxs trabajadorxs acompañantes personalizadxs y terapéuticxs expresamos:
Que los niños, niñas y adolescentes sin ningún criterio de internación alojados en Hospitales de forma prolongada no son una “noticia”, estas estadías tienen en muchos casos más de un año y somos quienes mediante informes de trabajo cotidianos expresamos y damos perspectiva crítica de las condiciones singulares.
Que una parte histórica, trascendental y por tanto política del problema es la falta de garantías de los centros residenciales privados conveniados, quienes pueden obstaculizar los ingresos expresando “falta de condiciones y plazas” para garantizar alojamientos, a pesar de que reciben importantes partidas presupuestarias por cada «plaza» (cama) que expresan tener.
¿No pueden garantizar condiciones habitacionales, sanitarias, alimentarias, educativas y recreativas con las transferencias medidas en cantidad de plazas que nunca llegan a ocuparse?
¿Con el excedente, no se puede garantizar el personal idóneo, con condiciones dignas y capacitaciones para que puedan abordar estas situaciones de extrema vulneración, particularidad justamente de esta área?
Como contracara, los centros residenciales públicos son escasos y reciben partidas presupuestarias mucho menores. De hecho, actualmente dos de ellos tienen problemas edilicios para garantizar el servicio que es sostén y contención de estas niñeces y adolescencias, devaluando el rol de lo público.
Que lxs acompañantxs personalizadxs informan periódicamente a las autoridades sobre la situación en la que se encuentran estos niños, niñas y adolescentes en hospitales: ruptura de sus trayectorias escolares, falta de elementos básicos de higiene y esparcimiento, prolongación sin criterio médico en monovalentes para adultxs; reclamando por una política de alojamiento acorde a la edad y singularidad de cada sujetx.
Que si bien esto es un problema estructural, ante las enormes irresponsabilidades persistentes actuales, toda la posibilidad de ejercer una vida digna recae sobre lxs trabajadorxs de la salud que ya se han expresado oportunamente, pero también sobre lxs acompañantes personalizadxs que terminan siendo voz y ojos de las condiciones en las que viven.
En el último año y medio, registramos reiterados recortes en nuestros salarios que alcanzan cifras millonarias. Solo por dar un ejemplo, en marzo de 4 millones y en agosto de 1 millón.
¿Dónde va a parar ese dinero que sustraen del trabajo realizado y porque siendo la provincia del superávit no amplían los presupuestos, devolviendo y mejorando nuestra condición salarial y laboral?
¿Dónde se expresa que se esté ejecutando el presupuesto para el sector de forma regular?
Sin reconocimiento de la dignidad de lxs trabajadorxs y cumplimiento de sus derechos es imposible sostener políticas de cuidado, reparación y restitución para las niñeces y adolescencias.