Lucas Umansky tiene 23 años, vivió toda su vida en Funes, donde fue al Colegio del Sol. Luego de haber estado todo el 2022 en Israel, Lucas regresó a Argentina, y hace dos meses está nuevamente en Israel gracias a una oportunidad que le surgió para jugar al fútbol, su gran pasión.
Lucas experimentó en carne propia el ataque por parte del grupo terrorista Hamas. “Fue una enorme sorpresa. Me desperté a las 7 de la mañana con la explosión de un misil que cayó en un edificio a 10 cuadras de mi casa. Directamente me levanté, desperté a mis compañeros de departamento y me fui para el búnker. No teníamos idea de qué era lo que estaba pasando”, señaló en diálogo con InfoFunes.
“Para que se den una idea, en proporción, Israel es igual o más chico que Tucumán. Si bien yo estoy en Tel Aviv, en el centro del país, y el principal conflicto fue en el sur, es todo muy cercano. Puede pasar algo en cualquier momento”, agregó.
Umansky diferenció la situación actual con otros ataques que sufrió Israel en el último tiempo: “Este país suele tener este tipo de conflictos, pero es algo que la gente empezó a tomar con normalidad y convivir con eso. Lo de este sábado no fue algo normal: se metieron más de 300 terroristas. hicieron atrocidades, cosas inimaginables. La situación actual es muy diferente a otras. Hoy estamos en guerra, así lo planteó el Gobierno. No sabemos cómo va terminar todo esto, es minuto a minuto y día a día”.
“El panorama es muy complicado. Tengo muchos amigos y conocidos que están en Gaza y en el norte. Y esta situación les pasa a todos, la población está muy angustiada. Hoy caminaba por la calle y lo noté mucho en los rostros de la gente”, remarcó.
El joven intentó explicar los motivos que desataron la guerra: “Es muy importante que la gente sepa qué es lo que está pasando. No se trata de un conflicto entre dos países: miles de palestinos vienen a trabajar a Israel todos los días. El país también los ayuda, les proveé electricidad, gas. Desafortunadamente, dentro de Palestina está el grupo terrorista Hamás, que es quien tiene poder sobre la franja de Gaza. Ellos usan de escudo a los civiles para que Israel no pueda atacar y devolver un ataque tan simplemente”.
“La gran diferencia es que Israel todo lo que lanza es hacia objetivos puntuales, nada es hacia el azar. En cambio, Hamás hace todo lo contrario: tiran un misil para arriba, no les importe donde caigan, no apuntan”, sostuvo.
“En este momento estamos bien. Están sonando las alarmas pero en otras partes de Israel. El país tiene un sistema de defensa que se conoce como cúpula de hierro o “Iron Dome”, que sabe donde van a caer los misiles y, en base a eso, suenan las alarmas. Mientras no pase eso, nosotros podemos estar fuera del búnker, no es necesario”, manifestó.
El joven funense contó cómo se vive el momento en que suenan las alarmas y debe refugiarse: “El tiempo que tenés para meterte en el búnker es de acuerdo a donde te encuentres. Si estás cerca de Gaza quizás tengas 20 segundos, y quienes estamos en Tel Aviv tenemos un minuto, un minuto y medio. Varia señal eso. Durante el tiempo que estuve en Israel, había vivido situaciones de este tipo, pero fueron cinco minutos y terminaron. Esto ya es algo prolongado”.
Lucas dio su opinión acerca de las diversas marchas que se realizaron estos últimos días en Argentina y el mundo: “Me provocó mucha emoción ver la gente que se movilizó por Israel. Es gravísimo lo que está pasando. Me cuesta entender a los que se movilizan a favor del terrorismo; están defendiendo algo que va en contra de la humanidad. No estoy a favor de que mueran civiles inocentes, pero al país no le queda alternativa. Si baja las armas, Israel deja de existir. Si Hamás baja las armas, la guerra se termina”.
Umansky aclaró cuestiones acerca de cómo es el día a día en este clima de guerra que vive Israel. “Uno puede salir, pero la recomendación es estar alerta por si llegan a sonar las alarmas. Por suerte ahora no está pasando, pero es probable que sigan habiendo atentados”.
“El gobierno nos alertó que tenemos que estar preparados para lo que se viene, que compremos comida, agua, provisiones. Hay que estar atentos a lo que pueda pasar”, sentenció.
Y habló acerca de la posibilidad de volver a Funes debido a la situación actual de Israel: “Todavía no decidí qué voy a hacer. Puede que no vuelva a Argentina pero que salga del país por unas semanas a ver si se tranquiliza”.
“Solo queremos que termine esto. Cada vídeo, cada imagen, cada mensaje que llega es desgarrador. Es una angustia permanente, para los dos lados, porque hay civiles que son rehenes de Hamas y no tienen elección. Todos queremos retomar nuestra vida normal”, concluyó.