El lunes 23 comenzará a tomar forma el nuevo proyecto cinematográfico de Gustavo Postiglione. Es que ese día comenzará a rodarse el film Romeo y Ofelia, una historia que transcurre en un presente o futuro cercano en la ciudad de Rosario en medio de delincuencia, trifulcas y hechos violentos vinculados con dos barras bravas y algunos sectores que desean acceder a la política. Funcionan como dos familias que ponen en jaque a la ciudad producto tanto de pasiones históricas como de negocios turbios. El film cuenta con el apoyo del INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), del Ministerio de Cultura de Santa Fe y
con el Complejo Cultural Atlas como parte de la producción.
Con las actuaciones de Manuel Melgar y Camila Viale en el rol de Romeo y Ofelia, el elenco también estará integrado por Guillermo Pfening, Antonella Costa, la actriz rosarina Claudia Cantero, además de Tito Gómez y Juan Nemirovsky, quienes llevan una larga trayectoria junto a Postiglione.
Sobre el film, el comunicado de prensa adelanta que en la trama “convivirán Romeo y Julieta, Hamlet y Macbeth, con personajes que pueden ser identificados en mixturas unos con otros. Romeo tendrá mucho de Hamlet, Ofelia de Julieta, Claudio de Macbeth y Gertrudis de Lady Macbeth”.
Precisamente en ese jaque de violencia y negocios turbios, “los jefes de ambas bandas en algún momento necesitarán negociar –por encima de sus subordinados-, con el objetivo de delimitar territorios y sacarse de encima a terceros. Pero como en las grandes obras del bardo, la tragedia sobrevolará la historia”.
“La película se propone como una actualización del universo de Shakespeare a la realidad local dentro de un contexto específico: la lucha de dos bandas rivales, representativas de hinchadas de fútbol antagónicas”, señaló Postiglione, quien también agregó: “Propongo un film que rescate parte de las obras más populares de Shakespeare, sin pretender emular su poética, pero sí tomando su esencia, llevándolas a un contexto familiar en una ciudad que a su vez tiene una identidad que al igual que las obras puede ser reconocido en unas pocas pinceladas y hacen que ese reconocimiento se transforme en identificación por parte del público”.
Sobre el rodaje
Romeo y Ofelia será filmada en un solo plano secuencia durante una semana. Su escenografía tendrá un estrecho vínculo con lo teatral, construida en estudio (el subsuelo de la Sala Lavardén, un complejo cultural histórico de la ciudad de Rosario) donde se recrearán calles y locaciones. Se reconstruirá una ciudad que no es literalmente Rosario, pero que, sí la refiere y representa con sus conflictos actuales.
Como bien lo expresó su director: “Rosario es una ciudad shakespereana y a partir de ahí surge este proyecto, su dispositivo cinematográfico teatral, como la realidad ficción serán parte indiscutible del film”.